Puebla, Pue.- Este jueves se mantuvo por tercer día la suspensión de actividades en los planteles de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) para exigir seguridad y justicia en los homicidios de Ximena Quijano, José Antonio Parada, Francisco Javier Tirado Márquez, los tres universitarios, y Josué Vital Castillo, taxista de Uber, asesinados el domingo en Santa Ana Xalmimilulco, municipio de Huejotzingo.
Se sumaron a las protestas alumnos del Instituto Tecnológico de Puebla (ITP) y de la Universidad Tecnológica de Puebla (UTP), y aunque no se fueron a paro indefinido alumnos de la Universidad Iberoamericana y del Benemérito Instituto Normal del Estado (BINE) realizaron protestas en sus respectivos planteles.
La UTP informó que la suspensión de clases no es autorizada, pero respetan la decisión de los alumnos; con pancartas estudiantes del BINE también suspendieron actividades y exigieron seguridad y justicia; los alumnos del ITP tomaron las instalaciones y exigieron al gobierno del estado que frene la violencia.
En el patio central de la UPAEP cientos de jóvenes depositaron flores en las escalinatas en honor de Javier, Ximena, Antonio y Josué Vital Castillo. En esta universidad privada, donde estudiaban los dos jóvenes de nacionalidad colombiana, los alumnos dijeron que “vivimos en una sociedad en la cual hemos normalizado la violencia, pareciera que hablamos al aire y éste no nos responde; hoy nos encontramos con escritorios, consultorios, lugares en la mesa varios y quedan familias rotas, donde quedaron abrazos y caricias por dar.”
José Antonio Llergo Victoria, secretario General de la Universidad, dijo ante los asistentes al homenaje luctuoso que “son ustedes los que sacuden a esta sociedad adormecida e indiferente para gritarle que despierte, que no pueden quedarse pasiva mientras sus hijos e hijas son lastimados, violentados y asesinados todos los días. Son ustedes los que han asumido el riesgo y la iniciativa y han sumado a otros para decirle a México, a sus autoridades y a toda la sociedad, que este despertar no lo para nadie”.
Otra vez, ¡justicia!
Al medio día un contingente de jóvenes universitarios se reunió en el Zócalo de Puebla para exigir seguridad y justicia; de ahí partieron hacia la Facultad de Medicina de la BUAP donde todo aquel que quiera ingresar debe mostrar su identificación. Algunos de ellos gritaron durante el recorrido que “ser estudiante es más peligroso que ser delincuente”, “Si muero espero ser el último” o “Yo sí me quiero graduar”.
Por la mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que está pendiente de las investigaciones que están a cargo del gobierno de Puebla y urgió detener a los responsables. “Es un hecho reprobable, muy doloroso, que tiene que ver con la descomposición producto de la política neoliberal (…) Es un fruto podrido de una política en la que importaba el dinero, nada más lo material. Se abandonó a la gente”, afirmó.