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Rondas comunitarias: de defender al pueblo a combatir al narco

Desde el 15 de octubre de 2015, cuando Silvano Aureoles rindió protesta como gobernador, hasta el 30 de junio de 2019 se registraron 3 mil 369 homicidios

Escrito en ESTADOS el

Con más de 500 años, las Rondas Comunitarias se mantienen como las fuerzas de seguridad históricas de las comunidades originarias de Michoacán. Estos grupos civiles armados representan una visión de mundo prehispánico y, en la actualidad, constituyen una forma de autodeterminación, autogobierno y soberanía indígena. Son una figura similar a las actuales autodefensas.

Según registros históricos, antes de la colonización, los pueblos purépechas se organizaban, por medio de barrios, para la defensa o la guerra. Posteriormente, las Rondas fueron institucionalizadas y se establecieron en territorios densamente poblados por indígenas. Su misión era mantener el orden en las comunidades, por lo que surgieron diferentes tipos de rondas: ronda de noche, ronda de vigilancia y ronda comunitaria.

Actualmente, el objetivo de las Rondas comunitarias de Michoacán sigue siendo el mismo: defender a las familias, su patrimonio, su comunidad, sus recursos naturales y su identidad. Sin embargo, ante la violencia que ha azotado a la entidad en los últimos años, estos grupos armados se han vuelto una solución.

Ejemplo de lo anterior ocurrió en 2011, cuando el pueblo de Cherán (uno de los 113 municipios en los que se encuentra dividido Michoacán), se levantó en armas para defender su bosque de los talamontes, los cuales están liderados por integrantes del crimen organizado.

Se establecieron puestos de control armados, vigilados por las Rondas Comunitarias, en las tres carreteras que llegan al poblado. Desde ese entonces hasta la fecha, el pueblo de alrededor de 20 mil habitantes vive en el autogobierno.

Existen otros pueblos michoacanos, como Cherato, Cheratillo, Orsucato y 18 de marzo (ubicado en Tierra Caliente), que también cuentan con estas Rondas, las cuales han reforzado sus jornadas de vigilancia y entrenamiento ante la presencia de los cárteles que dominan en el estado.

Cherán encabeza la lucha

Liderado por mujeres, Cherán se levantó en armas para defender su bosque de los madereros y, de paso, también expulsaron a la policía y a los políticos.

Las mujeres se reunieron en secreto para organizarse. Estaban cansadas de los homicidios y secuestros, así como de los cobros de extorsión a pequeños negocios que hacían hombres enmascarados.

Para el año 2011, los madereros estaban talando árboles cerca de una de las fuentes de agua de Cherán. Un grupo de mujeres fue al bosque para tratar de razonar con los hombres armados, pero solo recibieron insultos y fueron echadas.

Sabían que era demasiado peligroso hacer frente a los madereros en el bosque, por lo que pensaron detener a los camiones cuando pasaban por el pueblo, donde tendrían el apoyo de sus vecinos.

La madrugada del 15 de abril de 2011, comenzó el levantamiento de Cherán.

En la carretera que baja desde el bosque, las mujeres bloquearon los camiones de los madereros y tomaron como rehenes a algunos de ellos.

Las campanas de la iglesia de El Calvario sonaron y al amanecer cohetones estallaron en el cielo para alertar a la comunidad del peligro.

Los policías municipales llegaron con el alcalde y otros hombres armados arribaron para liberar a los rehenes.

Hubo un enfrentamiento entre la gente del pueblo, los madereros y la policía.

Terminó después de que dos madereros fueron heridos por un joven que encendió un cohetón directamente contra ellos.

Y ahí Cherán, un pueblo de 20 mil personas, comenzó su jornada hacia el autogobierno.

Narcoterrorismo

El 15 de septiembre de 2008, en plena celebración del Grito de la Independencia en la plaza principal de Morelia, explotaron dos granadas de fragmentación que dejaron un saldo de ocho muertos y más de cien heridos.

El hecho conmocionó al país, y aunque hubo detenidos, que fueron liberados años más tarde ante la comprobación de fabricación de pruebas, las víctimas del atentado no han recibido justicia.

Michoacán, uno de los estados más lastimados por la violencia del narcotráfico, también es uno de los principales puntos de producción y distribución de drogas, en especial de las metanfetaminas y otras sustancias sintéticas.

Forma parte de la Tierra Caliente y cuenta con uno de los principales puertos marítimos del país (Lázaro Cárdenas), por lo que su importancia para el crimen organizado es prioritaria.

El cártel predominante en la entidad es el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), liderado por Nemesio Oseguera, “El Mencho”.

Datos del Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública (SESNSP) revelan que, desde el 15 de octubre de 2015, cuando rindió protesta como gobernador Silvano Aureoles, hasta el 30 de junio de 2019, se registraron 3 mil 369 homicidios.

Información de la Secretaría de Seguridad Pública de la entidad señala que el recrudecimiento de la violencia en distintos municipios se debe a la disputa entre los líderes de Los Viagra y el CJNG.

Deben de desaparecer: Aureoles

En noviembre de 2018, el gobernador Silvano Aureoles, expresó que las rondas comunitarias en Michoacán tendrían que desaparecer “lo más pronto posible”, porque no se debe permitir que haya personas armadas haciendo funciones de seguridad pública.

El mandatario estatal dijo que se va a poner orden en la cabecera municipal de Nahuatzen, donde, de acuerdo con el alcalde, los integrantes de la Ronda Comunitaria disponen de armas de uso exclusivo del Ejército, con las cuales amedrentan a la población.

Sabremos en su momento de dónde provienen las armas, pero esas famosas rondas o grupos que están al margen de la ley tienen que desaparecer lo más pronto posible