Main logo

Reubican a reos peligrosos de NL en penales de Guanajuato y Morelos

El cambio se hizo en 119 internos, hombres y mujeres, considerados de alta peligrosidad; estaban en los penales de Topo Chico, Apodaca y Cadereyta

Escrito en ESTADOS el

MONTERREY.- Como parte de la depuración para la certificación de los Ceresos estatales, este jueves fueron trasladados 119 internos, hombres y mujeres, de los centros penitenciarios de Nuevo León a penales de Morelos y Guanajuato.

Extraoficialmente se informó que un número de 20 mujeres fue llevado al penal femenil número 16 ubicado en la Ciudad de Cuernavaca, Morelos.

Este grupo de mujeres internas fue trasladado, vía aérea, al aeropuerto regiomontano para abordar el vuelo a Morelos al filo de las 8:00 horas.

Por lo que respecta a los hombres, estos fueron trasladados durante la madrugada vía terrestre. Se les movilizó en cuatro autobuses con destino al penal número 12 en Ocampo, Guanajuato.

En el operativo participaron cerca de 30 vehículos y unos 150 elementos de diversas corporaciones desde las 02:00 horas.

Los internos son calificados como los más problemáticos de los penales Topo Chico, Apodaca y Cadereyta.

Dos horas después partió el convoy, escoltado por 102 uniformados repartidos en 23 vehículos, hacia el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 12 de Ocampo, Guanajuato.

Participaron en ese traslado unos 100 elementos de Seguridad Penitenciaria, 26 de Fuerza Civil, dos de Policía Federal y 15 de la Secretaría de la Defensa Nacional.

Al filo de las 5:30 horas, un convoy con 20 internas, que presentaban algunos problemas de orden en el nuevo Penal Femenil de Escobedo, fueron trasladadas en un autobús escoltado por unos 15 vehículos hacia el Aeropuerto Internacional Mariano Escobedo, de Monterrey.

A bordo de un avión Embraer 190 de 49 plazas las llevaron a Cuernavaca, Morelos, para ser internadas en el Cefereso Femenil Número 16 de ese estado.

Para este traslado se utilizaron 30 efectivos de Seguridad Penitenciaria y 10 de Fuerza Civil. 

Según el asesor del gobierno de Nuevo León, Eduardo Guerrero Durán, el operativo es para dar continuidad a la estrategia que se implementó desde noviembre de 2018, con el objetivo de mantener el control, el orden y el respeto en las penitenciarías neolonesas.