Por asesinar a una niña de seis años de edad en el municipio de Cacahoatán, un grupo de pobladores hizo justicia por cuenta propia y quemó vivo a quien presuntamente perpetró el hecho violento, identificado como Alfredo.
Enardecidos tras hallar a la menor Jarid Cinco, en una parcela del ejido Faja de Oro, de esa localidad, los colonos bajaron de la patrulla municipal al presunto criminal y, tras golpearlo en vista de los propios uniformados, decidieron prenderle fuego.
Ante tal hecho, la Fiscalía de Distrito Fronterizo Costa anunció que ya inició una carpeta de investigación no solo por el feminicidio, sino por el asesinato del presunto agresor de la pequeña.
Además, el fiscal general, Jorge Llaven advirtió, a través de un boletín, informó que este hecho no quedará impune, y que incluso también se abocarán al grupo de habitantes que quemó a Alfredo.
Como se informó, Jarid fue reportada como desaparecida hace unos días, y fue hasta hoy por la madrugada que la hallaron muerta. Se desconoce si sufrió alguna agresión sexual, lo que tendrá que revelar la instancia judicial.
(Brenda Lugo)