COATZACOALCOS, VER – En una pared de ladrillos de color verde que no alcanzaron a repellar, se observa el letrero de color amarillo y letras negras sujetado con cuerdas, clavos y taparroscas donde se lee “Col. Andrés Manuel López Obrador”.
Se trata de una colonia fundada en el año 2014 en el poniente de Coatzacoalcos frente al fraccionamiento Punta Caracol, sobre la avenida Jirafas y que actualmente cuenta con 160 lotes “adjudicados” de forma irregular.
Como ha pasado con muchos asentamientos irregulares, además de la falta de servicios en orden, los vecinos se enfrentan a disputas legales y litigios en juzgados.
La idea del nombre surgió entre todos los vecinos, quienes pensaron que al tener membrete podría ser más fácil regularizar este lugar, donde no pierden la esperanza de que el presidente los voltee a ver y les ayude.
El predio mide cerca de cinco hectáreas que conectan al malecón costero de la ciudad, donde apenas hace un mes los más de cien jefes de familias que la habitan, decidieron poner letreros con el nombre de la colonia y de las seis calles que han creado entre cada terreno.
Hay casas de lámina, de cartón, pero también de concreto y alguno que otro negocio que pretende extenderse en este sector como una oportunidad de progresar.
“Somos 160 familias las que compramos en este lugar, de las cuales vivimos poco más de cien y estamos luchando desde el 2014 para regularizarnos; no entramos como invasores, aquí nos vendió Manuel Bringas Burelo y nos ha estado estafado por mucho tiempo, porque nos dieron pura escritura falsa y ahorita ya fuimos a Invivienda y ellos aparecen como verdaderos dueños de estos terrenos”, señaló don Carlos Ramírez, uno de los primeros habitantes del “paraíso de AMLO”, como le llaman con ironía.
Cada predio costó 100 mil pesos, pero sin escrituras
Debajo de un techo de lámina y bases de madera que don Carlos construyó, cuenta que la mayoría de los habitantes hicieron un trato con Manuel Bringas Burelo, supuesto dueño de todo el predio. Pagaron por cada lote cien mil pesos, incluso hubo gente que compró hasta 5 espacios por lo barato y la ubicación del predio a orilla de calle y en una zona donde la plusvalía aumenta.
“Son terrenos de diez por veinte y de quince por ocho metros cuadrados, cada uno costó cien mil pesos que comenzamos a pagar en abonos mensuales de entre dos mil y tres mil pesos, en mi caso yo estoy pagando desde el 2014”, afirmó don Carlos.
Sin embargo, aun cuando personas como don Carlos han pagado casi 60 mil pesos por cada predio, se han enfrentado a estafas, toda vez que en los seis años que lleva viviendo asegura que han aparecido al menos tres propietarios a este lugar.
Incluso en un par de ocasiones los han intentado desalojar, sin embargo, han logrado acreditar los pagos que han dado, logrando que hasta el momento los dejen de molestar.
Aunque Carlos dice que vive con el temor de que “en cualquier momento nos vengan a desalojar y pierda todo lo que ya invertimos”.
Lotificación indebida
Al buscar información de esta zona nueva en la dirección de Desarrollo Urbano, se obtuvo que ni la colonia ni el nombre de López Obrador están registradas ante la dependencia municipal y tampoco en entes estatales.
“Podemos decir que se encuentra actualmente invadida esa fracción de terreno y que existe un proceso judicial que se está llevando a cabo en los juzgados correspondientes”, indicó Gerardo Mijangos Alvarado, jefe de la unidad jurídica de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Coatzacoalcos.
“Estamos conscientes de que estamos de forma irregular, por eso en el 2020 mandamos oficios al presidente cuando vino a Coatzacoalcos, le pedimos que nos echará la mano para regularizarnos porque ya mandamos papeles a Xalapa acreditando lo pagado”, señala Carlos.
Ya cuentan con servicio de energía eléctrica, aunque no tienen medidores, de la misma manera reciben agua potable; por ambos servicios no pagan recibos.
A pesar de todos los conflictos legales, algunas familias como la de Carlos han decidido instalar comercios de abarrotes y diversos artículos para cubrir sus necesidades.
Cuarta Transformación y Beatriz Gutiérrez Müller
Con el código postal 96536 y entre calles de arena y sin medidas proporcionadas, se observan los letreros de color verde hechos de lámina, colocados con postes de madera o pedazos de árboles improvisados enterrados en la tierra.
Benito Juárez, Cuarta Transformación, Bicentenario, Bienestar y Beatriz Gutiérrez Müller son los nombres de las calles que fueron escogidas por los habitantes, quienes pretenden crear más calles con nombres similares.
Entre esas calles caminan grandes y chicos, -algunos para ir a trabar y otros a realizar mandados-, llegan a la orilla de la avenida Jirafas donde esperan el transporte público, ya sea taxis o urbanos cuyos choferes ya ubican esta zona como “la colonia de AMLO”.
“Cooperamos entre los vecinos y mandamos a hacer la lona y los letreros porque ya tenemos un representante de la colonia, con quien nos organizamos para colocarlos también”, dice otra vecina que decidió omitir su identidad.
“Queremos que López Obrador nos voltee a ver y nos regularice”
Después de seis años algunos habitantes optaron por dejar de pagar, pues aseguran que mientras no se regularice este asentamiento corren el riesgo de perder todo, “hasta lo que ya construimos, y algunos le metimos block”.
Carlos cuenta que en varias ocasiones han recurrido a Invivienda, Patrimonio del Estado y Catastro, sin que obtengan alguna respuesta positiva.
Por lo que ahora que decidieron ponerle el nombre del presidente de la republica a este asentamiento, hace una petición a nombre de sus vecinos:
“Nosotros no lo hacemos por política, lo único que queremos y pedimos al presidente es que no ayude a que esta colonia tenga forma y este en orden, porque todos los que pagamos queremos un techo donde vivir y tener nuestro propio patrimonio”.
vtr