CUERNAVACA.- Facundo Guerrero, ayudante municipal de Puxtla, un poblado que pertenece al municipio de Cuautla, ingresó al hospital de Axochipan “Dr. Ángel Ventura Neri”, tras resultar contagiado de covid-19.
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Su ingreso al nosocomio, ubicado en el municipio de Axohiapan y que pertenece a los Servicios de Salud de Morelos (SSM), fue el 2 de junio y cuatro días después falleció.
Ese mismo día, su familia enfrentó una doble tragedia debido a que personal hospitalario les entregó un cuerpo que no pertenecía a Facundo.
“Nos notificaron que él había fallecido y nos dijeron que por la situación de la pandemia, y para evitar algún contagio, no podríamos pasar a identificarlo y la entrega sería directamente en la funeraria”, narró su hija a La Silla Rota, quien solicitó el anonimato.
La mujer explicó que por el riego de contagio debían llevar a sepultar a su padre en menos de cuatro horas y así se dispuso todo para que llegara directamente al panteón.
La carrosa fúnebre partió del hospital de Axochiapan rumbo a su natal Cuautla, donde algunos familiares y amigos, con medidas de sana distancia y de protección, lo aguardaban en el panteón de la localidad.
Apenas llegábamos a Cuautla cuando nos llamaron del hospital para decirnos de la equivocación
Así que la carrosa, la familia y algunas autoridades del municipio de Cuautla regresaron a Axohiapan.
Al llegar en esta ocasión si le permitieron realizar el reconocimiento del cuerpo.
Me dijeron que iba a pasar para reconocer a mi papá y me dieron un cubrebocas y lo pude ver a una distancia de unos dos metros
Para la hija de Facundo esa equivocación representó “una bendición” porque “pude ver por última vez a mi papá”.
(Cuartoscuro)
Le mostraron el cuerpo dentro del féretro
“Le vi el rostro por una ventanita de la caja y para mí fue importante poder verlo”, añade.
Después regresaron a Cuautla para dar el ultimó a dios a Facundo, quién es recordado como sociable y muy trabajador.
Antes de ser el ayudante de su poblado, se desempeñó en diversos oficios, como mesero, jardinero, pintor de casas y organizaba eventos.
En Morelos es la segunda ocasión que se registra equivocación de este tipo.
La primera vez ocurrió en la zona sur en un hospital del Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS), ahora fue en uno que pertenece a Servicios de Salud de Morelos (SSM).
Sin embargo, las autoridades culpan a la familia por el error.
“Si hay que aceptar que hubo una equivocación. Sin embargo la familiar (hija del fallecido) no quiso identificar a su familiar, lo que nos llevó a que haya sido más grande la equivocación, pero se regresó el cuerpo y se ingresó a la funeraria el cuerpo correcto”, explicó Héctor Barona Olivares, director de SSM.
Desafortunadamente hay que reconocer que el día 5 de junio desgraciadamente fallecieron dos personas en el mismo turno vespertino y nocturno y el día 6 de junio se mandó al personal indicado a llevar estos dos cadáveres al mortuorio, lo cuales se meten en bolsas negras
De acuerdo a la versión de Barona Olivares, “una vez que el cuerpo estuvo en el mortuorio, se le habló a la hija de la víctima para que identificara a su familiar, el que se iba a llevar a la funeraria, pero la hija del fallecido no quiso identificar a su familiar”.
Por ello, al momento en que arribó el personal de la funeraria “se llevó a la persona fallecida” y momentos después el personal hospitalario “se da cuenta en el hospital que a la persona que se llevó (la funeraria) es la equivocada”.
De acuerdo con la información del funcionario de SSM, “inmediatamente el Hospital habla a la funeraria y el mismo personal de la funeraria regresa al fallecido (…) sin ningún inconveniente”.
Todo se hizo de acuerdo a los lineamientos que tenemos en los hospitales (…) Si fue una equivocación por parte del hospital, pero se corrigió de forma adecuada
Pese a la equivocación, la familia aseguró que no procederá legalmente en contra del hospital.
“No vamos a proceder legalmente, ni nada, porque si bien hubo un error, mi papá recibió una excelente atención y nos apoyaron mucho y estamos muy agradecidos por todo”, subraya la hija de Facundo.
René Trejo Espinoza, director de Panteones de Cuautla, quién en el momento de la equivocación acompañó a la familia hasta el hospital, detalló que las autoridades hospitalarias les explicaron que a los cadáveres “se les ponen una etiqueta con cinta donde escriben su nombre y datos personales, pero por las distintas maniobras y otros factores, en algunas ocasiones, se diluye la tinta, situación que provocó la confusión”.