HIDALGO (La Silla Rota).- Por su presunta responsabilidad en la comisión de delitos, al menos 70 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del estado (SSPH) han sido removidos de sus cargos o solicitaron baja en la corporación, desde el inicio de la administración del gobernador Omar Fayad Meneses, el 5 de septiembre de 2016.
Lo anterior lo confirmó el titular de la SSPH, Mauricio Délmar Saavedraen una entrevista en Tula, donde la dependencia intervino en 123 incidentes relacionados con probable robo de hidrocarburo, desde enero del año anterior. El huachicoleo, reconoció, es uno de los delitos en los que posiblemente estaban involucrados exagentes.
“Al principio de la administración tuvimos que procesar a algunos compañeros de la policía estatal que sí estaban en este tipo de actividades. Actualmente, no tenemos denuncias formales, pedimos denuncias, a la Contraloría, a Asuntos Internos (de la SSPH), al 911”, indicó el exoficial de la Policía Fiscal Federal, quien no proporcionó áreas en las que laboraban quienes fueron separados de la secretaría o pidieron al Consejo de Honor y Justicia una baja voluntaria, presumiblemente, añadió, por una relación con la delincuencia.
“En cuanto tengamos algún dato (de posible corrupción) vamos a actuar sin miramientos, contra cualquier persona, sea policía municipal, personal administrativo, miembro de la Policía Investigadora e inclusive de alguna otra institución federal”, insistió.
Las 70 salidas, especificó, no se deben a reprobación de exámenes de control de confianza, sino a posibles nexos criminales.
“El que no estén aprobados (en estas pruebas) no significa que estén coludidos con delincuencia organizada o que sean malandrines. El no aprobado significa que traen alguna cuestión psicológica, alguna carga por estrés y al hacer sus exámenes ahí lo detectan, junto con, posiblemente, el examen médico”, señaló.
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