Según un estimado del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Estado de México (DIFEM), anualmente llegan a los albergues un aproximado de 40 infantes por maltrato infantil por parte de sus padres. Así lo menciona la Directora de Servicios Jurídico Asistenciales del DIFEM, Imelda López Martínez, quien asegura que, en conjunto con el Ministerio Público, se da seguimiento puntual a este tipo de casos para proteger a la integridad de los menores que llegan a los diferentes albergues del instituto.
La jurídico señala que a partir de una denuncia, se averigua en primer a instancia la autenticidad del abuso y posteriormente se asegura que el padre rinda su declaración correspondiente ante las instalaciones del DIF. En el caso que las averiguaciones previas confirmen el hecho, el MP comienza con una carpeta de investigación que definirá la situación legal del niño y de él, o los padres.
López Martínez indicó que mientras procede la investigación, el menor pasa al resguardo del DIF y dependiendo del delito y tipo de maltrato cometido por los victimarios, durará su estancia en alguno de los centros. En esta etapa se valora si el infante posee una alternativa familiar con aptitudes para cuidar de él.
Según información pública de la institución mexiquense, actualmente cuenta con 4 albergues temporales, el Albergue Temporal Infantil; Albergue Temporal Villa Hogar, Albergue Temporal de Rehabilitación Infantil “ATRI”, y el Albergue de Villa Juvenil, el cual aloja exclusivamente a varones mayores de 14 años. Los tres primeros se ubican en el municipio de Toluca y el último en la región de Zinacantepec.
En cada uno de estos centros residen 285 niños de entre 0 a 18 años. Todos gozan con la atención de trabajadores sociales, psicólogos, alimentación diaria, centros de salud y de educación.
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Por otra parte, López Martínez indica que si la evaluación final confirma los presuntos actos de maltrato, el Ministerio Público dictaminaría la patria potestad al DIF y se la retiraría al familiar, además se le sancionaría dependiendo de los hechos que involucran la decisión jurídica. En este tenor, el DIF tendría la capacidad de poner al niño en adopción.
Respecto a la cantidad de carpetas de investigación o casos reportados de maltrato, la Directora de Servicios Jurídicos aclaró no conocer la cifra específica, debido a que señala que el Ministerio es el único encargado de darle seguimiento y de imputar las multas o sanciones a los abusadores.
“Muchas veces solo llega el menor a las instalaciones del DIF, ellos (el MP) son los que dan el seguimiento. Nosotros solo nos encargamos del menor y de su posible reintegración con algún familiar”, puntualizó. En lo que respecta al proceso de adopción, el DIF maneja una recepción de solicitudes durante todo el año.
El trámite consta de la presentación de una serie de requisitos, además del sometimiento de las parejas a pruebas psicológicas y de trabajo social, para asegurar la viabilidad mental, física y sustentable de poder hacerse cargo de un menor de esas condiciones.En el caso de aprobar con los debidos estatutos, se realiza una solicitud oficial bajo el nombre de la directiva del DIF mexiquense, de esta manera, las personas interesadas se canalizan a un departamento de valoraciones psicosociales para, finalmente, declarar apto su expediente y adquirir un oficio que ingrese a una lista de espera, la cual depende de los intereses y rango de edad del niño que se desee adoptar.
En lo que va del año, ante el DIF se han presentado un total de 100 solicitudes, donde 60 han aprobado las pruebas requeridas y cuentan con su oficio correspondiente, la mayoría de ellas pide a menores de 0 a 2 años de edad.
vva