"Supe que cuando viste su bracito bajo aquel escombro ese 19 de septiembre gritaste con un dolor palpable e insoportable, desgarraste tu garganta y tus lágrimas brotaron como si hubiese sido tu propia sangre quien hallabas sin vida".
Es parte de lo que Marco Gil Vela escribió para agradecer a uno de los elementos del ejército mexicano quién sacó de los escombros a sus dos mujeres.
Marco, quien se dedica a la fotografía en el estado de Morelos, narró que ese día se encontraba en una sesión para una quinceañera en Cuernavaca cuando de pronto comenzó a temblar e instantáneamente, aunque aún no paraba el movimiento, intentó comunicarse con su esposa.
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Ella trabajaba atendiendo el comercio de sus padres en Jojutla, Morelos. Por las mañanas permanecía ahí junto a su bebé Sarah quien tenía un año de edad.
Marco no podía comunicarse con su esposa por la saturación de las líneas telefónicas y mientras iba en camino a Jojutla, recibió un mensaje de whatsapp de su cuñada, quien le decía a través de un audio que lo necesitaban allá, que su hijo de tres años estaba a salvo pero su esposa y su bebé se encontraban atrapadas en la casa.
Recordó que el camino que normalmente se recorre en cuarenta minutos, por los derrumbes hizo esta vez tres horas y media.
Finalmente llegó a la casa de sus suegros. Quería entrar pero no lo hizo porque podía entorpecer los intentos para rescatarlas.
Un primo de la esposa de Marco, en su intento por ayudar dijo conocer la casa y señaló el lugar en que debería encontrarse su esposa en el momento del sismo. Después un soldado vio el bracito de la bebé y comenzaron los trabajos para rescatarlas, sin embargo, no se pudo hacer nada, la mamá falleció en el lugar y la bebé mientras era trasladada a un centro de salud.
Marco agradeció a través de un texto en redes sociales a las distintas corporaciones que han apoyado en el rescate de personas, pues a pesar de la pérdida, el se pudo despedir del cuerpo de su esposa y de su hija.
"Agradezco a Dios el que haya puesto a la gente ahí para ayudarnos, porque aunque hayan sido cuatro o cinco horas de agonía, nosotros ya les dimos entierro católico. Sé que les demostré todo y las extraño mucho, pero gracias al apoyo de los demás hemos podido salir adelante", expresó.
Agregó que este domingo 24 de septiembre, bautizarían a Sarah. Todos los preparativos estaban listos, pero el sismo lo cambió todo.
fmma