Veracruz, Ver. – El estado de Veracruz se encuentra dentro de las cinco entidades federativas del país con más deuda y obligación financiera, alcanzando más de 40 mil millones de pesos en el primer trimestre del 2020, según datos del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados.
Pese a que el Gobierno de Veracruz redujo dos millones 585 mil pesos con respecto al primer trimestre del 2019, se mantiene en el lugar número cinco, solo por detrás de la Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León y Chihuahua.
El economista y catedrático de la Universidad Veracruzana, Jorge Acosta afirmó que el panorama no es alentador, ya que la crisis que generó la pandemia de covid-19, vendrá a complicar la situación de la deuda en los estados, principalmente en aquellos que presentan los montos más altos como Veracruz.
del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) indicó que 27 estados presentan un nivel de Endeudamiento Sostenible y cuatro en observación, en el caso de la entidad veracruzana su endeudamiento es calificado como aceptable.
En el rubro de “Servicio de la deuda y pago de inversión”, Veracruz paga 4 mil 350 millones de pesos, siendo de nueva cuenta la quinta entidad federativa que más abona por deuda pública en el país.
En tanto, en el mes de mayo el secretario de Finanzas y Planeación de Veracruz, José Luis Lima Franco, había confirmado que el estado contrajo créditos de reestructuración de la deuda.
Para enero de este año el gobierno del estado registró nuevos créditos simples por 17 mil 552 millones 800 mil 955 de pesos a través de distintos entes bancarios.
Aunque, Lima Franco dijo que estos créditos simples no significan una nueva deuda, el economista Jorge Acosta opina todo lo contrario, ya que todo préstamo genera un incremento ya sea a mayor o menor plazo.
Covid impacta en deuda pública
Según el especialista debido a los estragos económicos que está dejando la pandemia del covid-19, el panorama para cubrir la deuda pública se encuentra estancado, ya que, si bien el estado puede que no aumente la deuda, también no se podrá disminuir.
“Aunque vayamos pagando, los intereses nos van comiendo y esto implica que la deuda se sigue manteniendo, pues hay veces que no se abona al capital es por eso que se sigue manteniendo”, dijo Jorge Acosta.
Se espera que a causa del covid los ingresos por concepto de impuestos disminuyan significativamente, debido a que esta pandemia afectó a cientos de empresas en especial a la micro y mediana, los dueños no tendrán con que hacer frente a los pagos de Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA), lo mismo que para las cargas fiscales estatales, aseguró el especialista.
“Al no haber ingresos por parte de los empresarios y trabajadores, entonces no se está recaudando el monto que se necesita y este es el impacto que se está teniendo”, comentó.
Una deuda histórica
Desde el 2013 el estado contaba con una deuda pública de más de 45 mil millones de pesos, esta se obtuvo mediante créditos que otorgaron bancos de deuda interna, para establecer programas de obras, comentó Jorge Acosta.
Fue en el periodo de exgobernador Javier Duarte de Ochoa en el que hubo un incremento mayor, a causa de las múltiples empresas fantasmas, gastos públicos no justificado y pocas obras.
Cerrando su sexenio con un adeudo mayor a los 45 mil 801 millones de pesos, este monto supuestamente había incluido deuda bancaria, proveedores, contratistas y pago de pensiones a los trabajadores estatales.
Después viene los dos años de gobierno del panista Miguel Ángel Yunes Linares, con la promesa de no incrementar la deuda, pero al finalizar su mandato dejó un incremento de pasivos con bancos a corto y largo plazo por un total de 44 mil 354 millones de pesos.
Pese a que en el actual gobierno de Cuitláhuac García Jiménez no se ha registrado un aumento exponencial, también sigue sin haber programas de infraestructura, ni obra pública, puntualizó Jorge Acosta.
