CHILAPA, Guerrero (La Silla Rota).- En medio de la disputa entre grupos de la delincuencia organizada, la cual ha dejado decenas de ejecuciones y desapariciones en Chilapa de Álvarez, el gobernador de Guerrero Héctor Astudillo Flores reconoció que el municipio es un caso especial en donde se ha rebasado la brutalidad.
En entrevista en el Palacio de Gobierno en Chilpancingo el gobernador se refirió a la violencia que vive el municipio de Chilapa, ubicado en la zona Centro de Guerrero, donde han ubicado a los grupos de la delincuencia organizada de "Los Rojos" y "Los Ardillos" como los responsables de la ola de ejecuciones.
“Hay que reconocer que Chilapa es un caso especial y los trabajos se deben concentrar ante la ola de violencia que ha existido, Chilapa es un tema que ha rebasado la brutalidad”, dijo Astudillo Flores.
Tan sólo el día de ayer, autoridades localizaron una casa de seguridad donde había cuatro bolsas con restos humanos, además de siete camionetas, una de ellas con blindaje artesanal.
Además el Colectivo Siempre Vivos ha contabilizado en lo que va del año por lo menos 60 homicidios en el municipio, resultado de las disputas entre los criminales.
Astudillo Flores habló también de la violencia en el municipio de Arcelia, en la región de la Tierra Caliente, en donde más de 30 civiles irrumpieron en el Ministerio Público y se llevaron a tres personas, presuntamente del grupo delictivo "Los Tequileros".
Sin dar talles del operativo que se ha implementado para localizar los criminales liberados y sus cómplices, el gobernador se limitó a decir que dichos hechos son de los problemas que dan una mala imagen a la entidad, y resta las cosas buenas.
rgg