Tuxtla Gutiérrez.- Gerardo Vicente Grajales Yuca, médico acusado de abuso de poder y corrupción por parte de la hija de un exdiputado local que falleció de covid-19 en julio pasado, fue trasladado hace unos minutos a su casa, en la colonia Las Torres, de esta ciudad capital de Chiapas.
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Escoltado por varios agentes ministeriales, el médico, quien permaneció desde el fin de semana anterior hasta hoy en un sanatorio particular luego de que su estado de salud se complicara producto de una crisis hipertensiva, entró a su domicilio, abrazó a su esposa, hijo y a su madre, y se dirigió a su recámara a descansar.
Previo a su llegada, vecinos, familiares y amigos del doctor esperaban afuera de su domicilio, incluso con pancartas de apoyo, y en todo momento, casi al unísono, exigían su libertad definitiva.
De acuerdo con Fernanda Nestea, no sabe cómo se vivirá este proceso de prisión domiciliaria establecida por un juez de control del Poder Judicial, “mi esposo trae un aparato pegado en todo su cuerpo (por su situación de salud), el proceso sigue, pero al menos lo llevará en su casa”, aclaró.
Consciente de que por el momento solo se trata de un cambio de medida cautelar, es decir que no permanecerá más el Centro Preventivo “El Canelo”, en la ciudad vecina de Chiapa de Corzo, Fernanda espera que Grajales Yuca pronto quede libre, “y que ya se acabe esta pesadilla”.
bl