Monterrey, N.L- "Me duele, no estoy contento, no estoy satisfecho y sé que las familias sufren", dijo el gobernador Jaime Rodríguez Calderón sobre los hechos del penal de Cadereyta, donde murieron 17 reos.
"Ellos deben entender que no pueden crear problemas en un penal, porque pierde Nuevo León, siempre pierden las familias y pierde la autoridad", rompió el silencio el mandatario apodado "El Bronco".
El gobernador, que no había tocado el tema, lo abordó en su Segundo Informe de Gobierno en un gimnasio gubernamental, ante unos 2 mil invitados, incluyendo al secretario Aurelio Nuño, representante presidencial.
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Ahí, "El Bronco" anunció la ampliación del penal, pero el de Apodaca, con mil espacios más. En la actualidad hay sobrecupo de 600 personas más con las acciones de la Procuraduría estatal en combate al delito.
Será en noviembre próximo cuando se inicie esta obra de ampliación del penal de Apodaca, ubicado al norte de la zona metropolitana de Monterrey.
También reconoció el trabajo de la Fuerza Civil por defender el principio de autoridad.
"Felicitar a la Fuerza Civil porque se fajaron, porque hicieron lo que tenía que hacerse y defendieron en cierta medida el principio de autoridad", indicó.
"No lo puedo decir aquí, porque me jode el INE", señaló en relación a que la expectativa política para el 2018 es buena, y pidió a Aurelio Nuño que agradeciera al presidente Peña Nieto el apoyo para Nuevo León, por terminar obras como el metro en su tercera línea y hospitales que fueron abandonadas por la anterior administración.
A los diputados locales les pidió un diálogo abierto para sacar adelante el presupuesto estatal, y a los legisladores federales impulsar que no haya recortes o cambios al proyecto de Presupuesto de Egresos, que ya contempla recursos para la entidad.
Al evento también asistieron los gobernadores Roberto Sandoval, de Nayarit, y Francisco Domínguez, de Querétaro.
ams