VILLAHERMOSA, Tabasco (La Silla Rota).- Por el reclamo del robo de varias cabezas de ganado que le hizo el patrón, el capataz presuntamente asesinó al dueño del rancho, escondió el cuerpo y luego trató de aparentar que se trataba de un secuestro.
El ganadero Moisés “N” desapareció el 23 de febrero en su rancho en Pechucalco, Cunduacán, y 15 días después localizaron su cuerpo, en una propiedad aledaña.
El capataz Benito “N”, quien también cuidaba el rancho vecino al de la víctima, simuló que se trataba de un secuestro, aunque sin lograr ningún rescate.
La Fiscalía General de Justicia reportó que los forenses descubrieron que el ganadero había muerto desde el día de su desaparición a causa de un golpe contundente en la cabeza. La dependencia detuvo al cuidador del rancho, bajo la imputación de homicidio calificado y recibió prisión preventiva.
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Benito “N” intentó simular los hechos como si hubiera sido un secuestro, acción en la que contó con la colaboración de uno o varios cómplices.
Pruebas periciales indican que la víctima habría perdido la vida momentos cercanos a la fecha en que fue reportada como desaparecida, por lo cual, el presunto responsable se encuentra en prisión preventiva y sujeto a una investigación por su probable participación en el delito de homicidio calificado” informó la Fiscalía.
En el crimen, en las inmediaciones del rancho del ganadero, donde se encontraron, el hoy occiso habría recibido un golpe con un objeto contundente en la cabeza, para posteriormente ser atado y sumergido en un cuerpo de agua.
Tras reportarse la desaparición, el agresor habría pretendido simular un secuestro, solicitando el pago del rescate por su libertad. Las autoridades iniciaron las indagatorias y la búsqueda del ahora occiso.
Días después, se localizó el cuerpo sin vida en una zona aledaña a la propiedad y se llevó a efecto la necropsia de ley, la cual arrojó como resultado que la víctima falleció en fechas cercanas a su desaparición, lo que derivó en una investigación por el delito de homicidio y no por secuestro.
Al contar con “pruebas contundentes”, el 12 de marzo personal de la Vicefiscalía de Delitos de Alto Impacto dio cumplimiento a la orden de aprehensión en contra del cuidador de rancho, Benito “N”, por su probable responsabilidad penal en los hechos y el pasado miércoles 13 le formuló la imputación, logrando ante el Juez de Control obtener la medida cautelar de prisión preventiva.
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