Agua Dulce, Ver.- A María de Jesús Martínez de 55 años, el agua que ingresó a su vivienda, la mantuvo despierta despertó desde las tres horas, ella pertenece a una de las 900 familias que este lunes 2 de noviembre resultaron afectadas por inundaciones en el municipio de Agua Dulce.
“Pues el agua se metió a mi casa como a las dos de la mañana creo, porque nosotros nos despertamos a las tres, y lo que se mojó fue mi refrigerador, la estufa y una cama, pero después lo subimos en maderas y espero que aguanten, ahorita no los he prendido porque apenas estamos sacando el agua”, expresó.
Durante la madrugada, el río Aguadulcita alcanzó su nivel máximo de 7 metros con 80 centímetros, generando anegaciones en las colonias Pajaral, El muelle, El palmar, Solidaridad, Kilómetro 2.5 y Puebla, donde el agua subió hasta un metro en las zonas más bajas.
La Secretaría de la Defensa Nacional activó el plan DNIII-E para ayudar a las personas a salir de sus hogares, aunque María de Jesús y sus vecinos de la colonia Puebla no quisieron abandonar sus pertenencias por temor a perderlas, por lo que decidieron subir a los techos o en algunos casos a la segunda planta de sus hogares.
“Ahorita estamos esperando a que baje más el agua, porque aun tenemos unos 30 centímetros de alto en un cuarto y en el patio trasero si esta como 40 centímetros, eso no lo hemos podido sacar. Gracias a Dios estamos bien y no paso a mayores”, menciona la señora.
Entre todos los vecinos de la colonia, comenzaron a sacar el agua de las casas y calles, algunos se organizaron mejor que otros, pues era más fácil trabajar en equipo para sacar el agua que aun quedaba.
Para suerte de María y de los hidrómilos. Después de las siete horas dejó de llover en este municipio y el río que es de respuesta rápida también descendió de nivel.
Caminaron entre el agua durante casi 10 horas
Durante un recorrido realizado por este medio en algunas colonias afectadas, comprobamos que algunas personas si perdieron enseres domésticos como camas, colchones, muebles de sala y ropa. Aunque la mayoría previo y subieron sus pertenencias a lo alto.
“Pues gracias a Dios yo tengo una segunda planta que hicimos con mucho sacrificio, pues durante varios años hemos enfrentado esta situación y tuvimos que ahorrar para la segunda planta, pero hay quienes no lo tienen y pierden sus cosas cuando se mojan”, lamentó María.
Entre el agua y algunos sin botas, caminaban las personas en busca de agua limpia y escobas para sacar el agua y lodo que fue arrastrado por el río. Otros seguían sacando sus pertenencias de sus casas para llevarlas con familiares.
“Yo me llevo bocinas y tele, que es lo que puedo rescatar aquí con una hermana que vive en el centro, porque no sabemos si va a volver a pasar lo mismo”, mencionó Antonio Cruz, vecino de María.
Algunos limpiaban y otros acomodan lo que se podía bajar o rescatar de entre el agua. Y es que no es la primera vez que los vecinos de estas colonias se inundan con la crecida del río, aunque María dice que desde hace tres años no subía tanto el agua.
“Porque en junio igual se metió el agua, pero como medio metro o menos en la casa, pero ahora si se fue más de un metro joven”, reiteró.
Autoridades municipales, en coordinación con el Ejército, Marina, Guardia Nacional, Cruz Roja y Protección Civil brindaron auxilio a las familias afectadas durante todo el día.
Tras las afectaciones instalaron comedores comunitarios en distintos puntos del municipio, esto como medida de apoyo a las familias hidrómilas.
CONAGUA no atiende petición del dragado del río
Durante el recorrido que realizó por las zonas afectadas, el alcalde Sergio Guzmán Ricárdez reclamó a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) su omisión a la solicitud de los trabajos de dragado al río Aguadulcita, con lo que se podría prevenir su desbordamiento e inundaciones como las que se presentaron este lunes 2 de noviembre.
“Tengo que decirlo, no se vale que nosotros estemos solicitando su ayuda y hagan caso omiso, en varias ocasiones se lo hemos solicitado a los responsables de la CONAGUA y no nos apoyan de ese s lado, deberían saber que todo esto que pasamos se puede prevenir con un dragado del río que además es necesario”, afirmó.
Dijo que actualmente no cuentan con los recursos necesarios para realizar el dragado por cuenta propia, por lo que continuará insistiendo hasta que su petición sea escuchada.
Por lo que esperan que se apliquen los trabajos, de lo contrario la historia se seguirá repitiendo en Agua Dulce.