Sonora (La Silla Rota).- Además de la lucha que por años ha librado el pueblo Yaqui para proteger el agua, con la exigencia de la cancelación de la construcción del acueducto independencia; ahora un grupo de esta etnia libra una batalla para impedir la instalación de gasoductos.
Cansados de ver maquinaria y personal de la empresa constructora IEnova trabajando en la instalación del gasoducto, el domingo por la tarde un grupo de Yaquis del pueblo de la Loma de Bácum, municipio de Cajeme, comenzaron a desmantelar la obra.
Los integrantes de uno de los ocho pueblos de la etnia que se oponen a que el gasoducto pase por territorio Yaqui, quitaron la tubería y el cableado de fibra óptica que suministraba electricidad al proyecto en curso, mismo que transportaría gas natural al sur del estado.
Para los inconformes, esta organización invade su territorio por lo que se adjudicaron el derecho de detener el proceso con el saqueo de la obra.
El secretario Tradicional de la Loma de Bácum, Martín Valencia, respondió por los hechos perpetrados y explicó que al ver a los trabajadores de la empresa Gas Natural Fenosa trabajando en coordinación con la empresa que construye el gasoducto, sintieron indignación por lo que se avocaron a desmantelar la obra.
“Los miembros de la tribu comenzaron a hacer su rondín como siempre por la zona y al ver gente de la que estaba colocando el cableado decidieron ir a quitarlo, sienten que están invadiendo nuestro territorio, es normal que quisieran defender lo que les pertenece”.
Yaquis opositores al gasoducto logran amparo contra la empresa constructora
La compañía IEnova, que se encarga de la licitación para hacer realidad el funcionamiento de un gasoducto de Hermosillo a Estación Don (del centro al sur de Sonora), logró reunir firmas el año pasado con los gobernadores de los pueblos Yaquis para realizar el proyecto, sin embargo, un grupo de indígenas se rehúsa a que el proyecto se construya en su territorio.
La negativa de los miembros de esta etnia ubicada entre Guaymas y Ciudad Obregón, Sonora, se debe a la creencia de que el gasoducto pudiera en cualquier momento causar una explosión, lo que acabaría con la población Yaqui.
Una juez federal con sede en Ciudad Obregón concedió un amparo a este grupo de la Loma de Bácum para que exigieran la cancelación de la obra, con base a este recurso jurídico aseguraron que la empresa no solo violaba la decisión de la justicia sino también abusaba de sus derechos como tribu.
A raíz de la llegada de esta industria la etnia denuncia daños materiales a casas, parcelas, cerro del Boca Abierta, arroyos, zanjas, deforestación, corte de plantas medicinales, de pastoreo, agostadero, daño ambiental, afectación social, daño cultural y religioso.
Marín Valencia recordó que hace unos meses tuvieron la visita del Comisionado Nacional para el Diálogo de los Pueblos Indígenas perteneciente a la Secretaría de Gobernación , quien determinó que se violaron las leyes internas del pueblo de esa comunidad Yaqui.
Yaquis corren riesgo de acción legal en su contra por daños en obra
Una vez valorados los daños por el saqueo que propiciaron los Yaquis de la Loma de Bácum en la construcción del gasoducto, la empresa IEnova podría ejercer acción legal por las pérdidas registradas, indicó el delegado de gobernación en Sonora Wenceslao Cota Montoya.
Dijo que hasta el momento la compañía la cual resulta afectada por este suceso no ha presentado denuncia ante la instancia a su cargo pero que se mantendrán atentos a las exigencias de los empresarios como a las inconformidades de los yaquis para evitar desorden en la comunidad indígena.
“Si ellos se consideran afectados por supuesto que podrían presentar una denuncia o imponer alguna acción, nosotros aquí en gobernación estamos atentos y privilegiando que los asuntos se arreglen mediante el diálogo y equilibro entre las diferencias de las partes”.
Cota Montoya mencionó que aun cuando exista un amparo otorgado por la justicia federal a los Yaquis para impedir el paso del gasoducto por sus tierras, los inconformes no pueden actuar en ninguna circunstancia bajo ese método.
“Pudiera ser un argumento a utilizarse pero aunque existiese un amparo, el método y la forma para llevarlo a cabo no es ese, no te autoriza ninguna autoridad judicial hacer justicia por tu propia mano, no pueden tomar la ley en sus manos y actuar en consecuencia”.
Obra que ha causado división entre los pueblos indígenas
En octubre de 2016 un suceso violento marco la división entre las comunidades Yaquis, con el enfrentamiento a tiros que se registró por la edificación del tubo subterráneo que trasladaría el gas natural. Fueron poco más de 500 pobladores los que participaron en el altercado en Loma de Bácum. Una parte se oponía a la construcción y la otra defendía la obra.
Esta balacera de viernes 21 de octubre dejó un muerto ocho personas heridas y alrededor de 12 vehículos quemados, de acuerdo con el recuento de las autoridades de seguridad pública en el estado.
El conflicto se dio en la única comunidad del país que no había llegado a un consenso sobre la construcción de ductos de gas sobre su territorio.
Elementos de la Sedena, la Policía Estatal y Municipal acudieron ese día al enfrentamiento, que se dio entre los mismos indígenas.