Ver un tiburón ballena es un privilegio, pero ver a siete al mismo tiempo, es un regalo de la naturaleza que vivió en Quintana Roo, Itzel Chan, de 27 años.
La aventura de conocer al pez más grande del mundo comienza en Isla Mujeres, primero viajó más de dos horas en lancha hasta llegar a un punto del mar llamado “Agua Azul”.
En el sitio Itzel Chan descubrió que ya había en el sitio decenas de embarcaciones pequeñas y medianas, que al igual que ella, estaban llenos de turistas que deseaban ver al tiburón ballena.
El operador de cada lancha distingue la presencia del tiburón ballena, e indica a los turistas que es momento de entrar al mar para sentir la experiencia de estar cerca de la especie marina.
La indicación general a todos los visitantes es nadar a por lo menos tres metros de distancia del tiburón ballena, sin embargo, cuenta Itzel Chan, que hay turistas más intrépidos que nadan cerca del pez hasta que logran tocarlo.
La joven dijo que “se siente impresionante, porque en el lugar donde te arrojas al mar es azul marino el agua, y no alcanzas a distinguir ni siquiera un metro de ti en la distancia y cuando ves al tiburón acercarse te impresionas, logras ver incluso como los peces entran en las branquias, ves como entran y sales peces de la boca, te de miedo en efecto, pero al ver que es un animal tan inmenso y al mismo tiempo tan sereno te tranquilizas. Yo recuerdo que vi siete.”, dijo.
El tiburón ballena nada con rapidez, por lo que ver a uno toma entre tres y cinco minutos, y es necesario volver a subir a la embarcación para observar en que sitio se encuentra y volver a lanzarse al mar para verlo de cerca, explicó la joven.
Los tour del tiburón ballena se adquieren a través de Internet, ya que existen proveedores del servicio que promocionan los viajes. Existen tres puntos de donde salen los operadores en Isla Mujeres, el poblado de Chiquilá ubicado en el municipio de Lázaro Cárdenas, Quintana Roo y en Holbox.
Los precios de los tours varían pero el precio mínimo es de mil 500 pesos por personas en adelante, y sólo tienen derecho a viajar hasta el habitad natural del tiburón ballena aquellos que tengan permiso de las autoridades federales que protegen el medio ambiente.
Importante tener permiso, tiburón ballena es una especie en riesgo
En Quintana Roo se ha registrado la llegada de hasta 400 ejemplares que habitan de mayo a septiembre en aguas de Quintana Roo. El tiburón ballena se desplaza en un territorio marino de 600 mil hectáreas que cubren tres áreas naturales protegidas para realizar avistamiento.
El director de la Reserva del Tiburón Ballena explicó que la especie está en riesgo, mientras que la Semarnat lo cataloga como una especie amenazada dentro de la Norma Oficial Mexicana NOM-059-Semarnat-2010.
“La responsabilidad de la Conanp es precisamente poder conservar y garantizar que las especies se mantengan en el tiempo, el tiburón ballena es una especie con estatus de riesgo por eso necesitan tener un permiso de aprovechamiento que emite la Dirección General de Vida Silvestre de la subsecretaria de gestión para la protección ambiental de la Semarnat y una autorización que emite la Conanp para realizar la actividad turístico-recreativa de observación y nado, y esto es con la intención de poder disminuir los impactos que pudieran generar las embarcaciones y los turistas en el sitio, se tiene un compromiso con la especie de cuidar que las actividades de aprovechamiento que se realizan alrededor de la especie sean lo menos impactante posible para conservarla y hacer que la actividad sea una opción de empleo para las comunidades ”, dijo el director de la Reserva del Tiburón Ballena.
Para llevar turistas a la observación del tiburón ballena es obligatorio tener permisos y que tanto el capitán y el guía tengan la experiencia suficiente para desarrollar la actividad para evitar accidentes que afecten a los turistas y a la especie marina.
Detiene Profepa embarcaciones que llevan a turistas a ver el tiburón ballena sin permisos
En pleno inicio de las vacaciones de verano en Quintana Roo, fueron detenidas cuatro embarcaciones que llevaban turistas al avistamiento del tiburón ballena, porque no contaban con permisos de las autoridades federales.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizó en conjunto un operativo de inspección con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) sobre las aguas entre el norte y noroeste de Isla Contoy, zona conocida por ser área de alimentación del tiburón ballena.
La Profepa informó que verificaron a 80 embarcaciones turísticas por día, y durante el operativo fueron suspendidas de manera temporal las actividades de avistamiento de cuatro embarcaciones y también fueron asegurados los navíos, porque no tenían permisos para la observación, nado y buceo libre con snorkel de la especie, que emite la Dirección General de Vida Silvestre de la Semarnat.
A las embarcaciones aseguradas se les otorgaron un plazo de cinco días hábiles para presentar documentación oficial o permisos para el avistamiento de la especie, ya que podría constituirse un delito de conformidad del Código Penal Federal, o en su caso sanciones que van de 50 a 50 mil Unidades de Medida y Actualización (UMA) que tiene un valor por unidad de 75.49 pesos.
Para el director de la Reserva del Tiburón Ballena, Juan Pérez Ramírez, la falta de permisos suficientes para todos los empresarios que solicitaron podría formar parte de las consecuencias de que embarcaciones se aventuren a llevar turistas sin permiso de las autoridades ambientales.
Este 2017 se entregaron para el área de “Protección de Flora y Fauna de Yum Balam y la Reserva de la Biosfera Tiburón Ballena” 160 permisos a embarcaciones, equivalente a la llegada de mil 350 turistas por día, mientras que en la “Reserva de la Biosfera del Caribe Mexicano” se otorgaron permisos a 240 embarcaciones, y llegan más de dos mil visitantes a ver al tiburón.
Sin embargo, el número de empresas que solicitaron autorización para el avistamiento del tiburón ballena superan el doble a las que validó oficialmente la autoridad federal, ya que para la “Reserva de la Biosfera Caribe Mexicano” 370 empresarios pidieron una oportunidad, mientras que para la “Reserva de la Biosfera Tiburón Ballena y el Área de Protección de Flora y Fauna de Yum Balam” 320 embarcaciones solicitaron permisos.
“Las embarcaciones que no tienen autorización son invitadas o se les pide que regresen al puerto porque no pueden realizar la actividad”, dijo el director de la Reserva del Tiburón Ballena.
Dependiendo del tipo y tamaño de la lancha o barco, se trasladan entre siete a 10 turistas, cada tour de avistamiento de la especie cuesta mínimo mil 500 pesos por persona.