Oaxaca (La Silla Rota).- "Nos golpearon, nos insultaron, nos decían que nos iban a matar y tirar, pero lo que más me duele es como hicieron sufrir a la familia porque les dijeron que nos habían quemado y que ya estábamos muertos", recordó Simón Pérez López, quien por primera vez rompe el silencio e hizo su aparición pública a un año de su detención ocurrida el 19 de junio del 2016 en Asunción Nochixtlán.
En México en los últimos 9 años se presentaron 7 mil 695 quejas de casos de tortura en las comisiones estatales de Derechos Humanos; de estas, 2 mil quejas corresponden a Oaxaca, casi un 30% del total y representan una situación grave que casos de este tipo sigan ocurriendo y se encuentren en la impunidad, informó el organismo CODIGODH.
Tan solo el año pasado, se documentaron 23 casos de tortura por detenciones durante los hechos violentos ocurridos en Asunción Nochixtlán, San Pablo Huitzo y el crucero de Hacienda Blanca, de las cuales 19 se registraron en el municipio mixteco, dijo Alba Cruz Ramos, representante del organismo.
La pesadilla de la detención
Simón rompió en llanto al recordar el proceso que padeció desde su detención, junto con otros pobladores, por parte de la Policía Federal cuando excavaban una tumba en el panteón municipal. Todos eran ajenos a lo que ocurría en la avenida principal de la comunidad, donde un tumulto de gente de Nochixtlán y poblaciones vecinas salieron al paso de Policías Federales que los agredían.
Es la primera vez que uno de los detenidos de ese caso habla en público, desde ese día a la fecha estas personas habían estado invisibilizadas, nadie tocó su situación después de haber sido liberadas, el pasado el 22 de junio, tres días después de los hechos.
El hombre de 50 años de edad, detalló que el 19 de junio habían acudido a excavar un pozo donde enterrarían a un familiar, escucharon lo que pasaba a fuera sobre el camino que da acceso a la población, pensaron que como no estaban haciendo nada malo podrían permanecer en el panteón, terminar su encomienda e irse sin ningún problema.
Su sorpresa fue que hasta este lugar fueron rodeados por elementos policíacos que los sometieron de inmediato, a pesar de mostrar el permiso que llevaban por parte del ayuntamiento. "Que va uno a pensar que la Policía que se supone esta para cuidarse te va a agredir".
Contó que a partir de ese momento vivieron un verdadero infierno, perdieron noción del tiempo y lugar. Estas personas fueron subidas en un camión torton de la Policía, los colocaron boca abajo y encimados, ahí fue cuando recibieron todo tipo se insultos, maltratos, golpes y amenazas.
Fueron trasladados al cuartel general de la policía estatal en San Bartolo Coyotepec, los tuvieron por varias horas sin comer ni agua, hasta que un visitador de Derechos Humanos dio con ellos y a través de las presiones de las organizaciones fueron liberados.
"No podemos ver a la policía sin sentir miedo"
Simón trata, pero no puede evitar quebrar su voz e impedir las lágrimas, señaló que en este proceso las familias fueron las más afectadas porque hubo un momento en que les dijeron que los habían quemado.
“Mis hijos no pueden ver a la policía, si vamos a un lugar y se encuentra una patrulla los niños se asustan y me dicen: papá vámonos de aquí, les tiene temor”.
Simón señaló que entre los otros 19 pobladores se han apoyado y recibieron el respaldo de la organización CODIGODH a través de la cual fueron tratados psicológicamente y por su parte, sin involucrarse con la lucha del Comité de Víctimas 19 de Junio por la Verdad y la Justicia que integran familiares de los caídos y los heridos, exigen justicia y castigo a los responsables de todos los niveles de los actos de tortura del que fueron víctimas.
Exhortan a Congreso local legislar para adecuar Ley
Al cumplirse un año de la aprobación de la Ley Federal para Prevenir y Sancionar la Tortura, organismos civiles recordaron al Congreso de Oaxaca que tienen 180 días para legislar en la materia, en los términos que establece la legislación y cuidando todos los estándares internacionales que están contemplados.
Alba Cruz Ramos exigió a los diputados locales para que hagan con su trabajo y cumplan con su obligación para que se hagan las adecuaciones necesarias en el marco estatal, “y veamos como sociedad a las víctimas de tortura que tienen interés de justicia”.
Sostuvo que el principal obstáculo que se enfrenta es la impunidad para sancionar a quienes cometen actos de tortura, e incluso en las propias instituciones donde se ventilan las violaciones de derechos humanos hay resistencia para acatar las recomendaciones para empezar a erradicar estas actitudes.
Sostuvo que esta ley es el primee paso para ir erradicando la tortura, sobre todo en estados como Oaxaca donde existe un número de casos alarmantes.
Reitero que de las 7 mil 695 quejas a nivel nacional en la última década, dos mil han ocurrido en Oaxaca, pero lo más preocupante es que solo se hayan emitido 144 recomendaciones y de estas en la entidad se han emitido solo 12.