Una mujer cumplía una pena de 25 años en una cárcel de Jalisco por el homicidio de su pareja. Ella lo asesinó luego de padecer violencia sistemática por parte de él.
Este lunes, la mujer fue puesta en libertad gracias a la aprobación de la Ley de Amnistía aprobada por el Congreso de Jalisco a finales de 2019.
Su libertad se dio luego de que se comprobara la violencia en su contra y que en sus juicios no se hayan realizado con perspectiva de género. Su liberación es histórica.
“Es histórico para la reivindicación de los derechos de las mujeres. Un juez otorgó la libertad a una víctima de violencia sistemática que estaba condenada a 25 años de cárcel por parricidio", señaló Salvador Caro Cabrera, coordinador de la bancada del partido Movimiento Ciudadano en el Congreso jalisciense y promotor de la iniciativa.
Aunque es la primera vez que se aplican los procedimientos derivados de la Ley de Amnistía, en el estado hay más casos de mujeres encarceladas con características similares, donde mujeres acusadas de homicidio han solicitado la revisión de sus casos bajo esto la perspectiva de esta ley.
Cuando la legislación pasó por el Congreso, el gobernador Enrique Alfaro la vetó a principios de noviembre por imprecisiones en su redacción, sin embargo logró entrar en vigor este año y este fue el primer caso en el cual aplicaron los criterios contemplados en la ley.
Otros casos analizados con perspectiva de género en Jalisco
Aunque es la primera vez que una mujer es liberada por la Ley de Amnistía, ha habido otros casos que se analizan con perspectiva de género.
En diciembre del año pasado, el Poder Judicial señaló en un comunicado que se han analizado los casos de mujeres que se encuentran en prisión y se juzga con una perspectiva de género. En esa ocasión se informó que al hacer uso de la perspectiva de género -hasta esa fecha- habían sido liberadas 19 mujeres que cumplían una condena por algún delito.
En septiembre se dio la liberación de tres mujeres: María Guadalupe, Teresita de Jesús, y María de Jesús, quienes cumplían sentencia por el delito de Robo Calificado.
En el caso de María Guadalupe, quien cumplía una sentencia de nueve años, fue liberada a los ocho años –un año antes- luego de que se observaron antecedentes repetitivos de violencia familiar y conductas parasociales desde su niñez, hasta su vida de pareja con quien fue inculpada del delito que se le imputó.
Otro caso fue el de Teresita de Jesús quien cumplía una sentencia de nueve años pero fue liberada antes por motivos de violencia familiar, será liberada con seis años cumplidos dentro del centro de reclusión.
El otro casi fue el de María de Jesús, quien fue sentenciada a cinco años de prisión, pero obtuvo su liberación previa luego de que se demostrara por distintas vías su discapacidad física; y aunado a problemas de salud, será liberada tras cuatro años de prisión efectiva.