PUEBLA (La Silla Rota).- Mientras se llevaba a cabo una marcha en el municipio de Tehuacán para exigir justicia por el asalto y asesinato del universitario Aldo, en la capital poblana un grupo de hombres armados disparó a Estéfano Alvarado Granados de 23 años de edad y le quitó la vida.
La semana pasada tres familias lloraron la muerte de sus hijos universitarios y ahora una más pide por la recuperación de su hijo, quien estudian en el Tecnológico de Monterrey.
De acuerdo con las primeras indagatorias, al propietario del food truck Chicke N’ Waffle le dispararon al medio día, desde un vehículo en movimiento, en la zona de comida ubicada a un costado de la Prepa Ibero en Puebla y atrás de la Universidad Iberoamericana, campus Puebla.
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Estéfano estaba con su novia y algunos amigos, uno de ellos también salió lesionado por las balas, pero alcanzaron a trasladarlo a un hospital de la zona de Angelópolis, horas más tarde, el Tecnológico de Monterrey lamentó los hechos e indicó que estaba siendo atendido.
El joven de 23 años de edad estaba frente a su negocio cuando dos sujetos en pasaron en un vehículo y le dispararon de manera directa. Se habla que la víctima recibió al menos seis impactos, porque al ver que se movió volvieron a disparar.
Al escuchar las detonaciones, las personas que estaban en el área de comedia se tiraron al piso intentando salvarse de alguna bala perdida. La novia de Estéfano lo movió, pero el chico de tan sólo 23 años de edad ya no reaccionó.
Solicitaron el auxilio del 911 para atender al amigo de Estéfano que resulto herido.
Tras la balacera, la Universidad Iberoamericana precisó que los hechos no se habían presentado en sus instalaciones y tampoco alguien de la comunidad estudiantil tenía afectaciones.
Mientras se desconocían detalles de la balacera, policía municipal de San Andrés Cholula se presentó en la zona y elementos de la Fiscalía General del Estado para llevar a cabo las diligencias y el levantamiento del cadáver.
En lo que va de octubre, tres universitarios han sido víctimas de la delincuencia en Puebla.
José Andrés de Larrañaga Canalizo de 20 años de edad y estudiante de la Universidad de Ciencias y Desarrollo (UDES) fue secuestrado y estrangulados por tres de sus compañeros.
Miguel Ángel N de 20 años de edad, fue sacado de su hogar la noche del miércoles por un comando que llevaba uniformes de policías municipales y un par de horas más tarde le dispararon y le quitaron la vida en el municipio de San Juan Atenco.
El jueves por la noche, Aldo Jiménez, de 23 años de edad, quien estudiaba Ingeniería Civil en el Instituto Tecnológico de Tehuacán fue asaltado cuando salió de la escuela. Su amigo también fue acuchillado, pero Aldo no resistió la operación.
En una semana, el saldo en Puebla son tres universitarios asesinados y dos más heridos. Además de Estéfano, cuyo asesinato extraoficialmente se le vincula con temas de narcomenudeo.
mvf