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Grupo paramilitar mata a 5 personas en municipio indígena de Chiapas

Señalan al actual alcalde de Tila, Limber Gregorio Gutiérrez, de encabezar grupo paramilitar

Escrito en ESTADOS el

TUXTLA GUTIÉRREZ.- El enfrentamiento de hace unas horas entre integrantes de la agrupación Paz y Justicia y los autónomos –apoyada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) – dejó como saldo, hasta el momento, 5 muertos y al menos una decena de heridos en la cabecera del municipio indígena de Tila, Chiapas (dicha cabecera fue cambiada de sede al ejido El Limar, precisamente por hechos de violencia en diciembre del año 2015). Se advierte que, entre los lesionados, hay reporteros de la región.

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“El gobierno quería sangre ¡pues aquí está la sangre, chingada madre!”, se escucha decir de uno de los pobladores que graba con su teléfono celular las agresiones, tanto verbales como físicas, con palos, machetes y disparos con armas de fuego.

Tras hacer un paneo en la zona de conflicto, el mismo habitante de El Limar advierte: “solo porque queremos el bienestar del pueblo tenemos que derramar sangre, por eso estamos acá luchando… a estos momentos no teníamos que llegar… y siguen tirando bala los del ejido”. Para ese momento ya había dos asesinados.

De fondo, una mujer, al parecer con altavoz, lamenta las consecuencias que se llegaron por falta de atención de las autoridades. Mientras uno de los grupos atacados lanza cohetones, la parte agresora dispara al aire como una forma de amedrentarlos.

El mismo personaje que graba las escenas advierte que incluso hay gente foránea, al parecer del ejido Bachajón, municipio de Chilón, “auspiciada” por el EZLN e, incluso, culpan al comisariado ejidal autónomo, José Ángel Pérez López de incitar a su gente de otras comunidades a que los agredieran.

VIOLENCIA A FLOR DE PIEL

Mientras continúa con la toma de imágenes, la persona enfoca a un compañero, quien se levanta la playera para mostrar un impacto de bala en el pecho, al parecer de calibre .22; entre los muertos se informó que están Elmar Martínez López, profesor jubilado; Adelaida Martínez Parcero, de profesión médica, y Pablo Vázquez Álvarez.

De acuerdo con los denunciantes de El Limar, entre otros autores materiales e intelectuales de esta agresión, quienes se comenzaron a reunir en la Casa Ejidal de Tila como a las 9 de la mañana, están: Carmen López Lugo, del Consejo de Vigilancia Autónomo, así como Horacio Lugo Guillén, Wulfrano Jiménez Ramírez, José del Carmen Pérez Pérez (señalado como líder de un grupo de corte paramilitar), entre otros de los “autónomos” e integrantes del Consejo Nacional Indígena (CNI).

Además, al parecer los agresores también se reforzaron con pobladores de otras localidades como Nueva Esperanza, Josivaquil y Bachajón; en total, se calcula, había como medio millar de hombres, la mayoría portaba pistolas y metralletas.

PRESIDENTE MUNICIPAL, EL PRINCIPAL “VERDUGO”

En un documento que circuló desde el pasado 30 de agosto, autoridades ejidales de Tila denunciaron que se mantenía el clima de extrema violencia, con disparos de arma de fuego, derribe de árboles y gente armada con machetes y rifles. 

De acuerdo con el Comité de Derechos Humanos de Base Digna Ochoa, el comisariado ejidal de esa población, Miguel Vázquez Gutiérrez, señaló en ese momento como principal desestabilizador a Arturo Sánchez Martínez, familiar de uno de los fundadores del grupo agresor Paz y Justicia “y parte de la escisión de este grupo paramilitar con nexos con el PVEM y el actual alcalde Limber Gregorio Gutiérrez”.  

Explicó que de hecho una noche antes comenzaron las detonaciones con armas de fuego, y además integrantes del CNI-EZLN bloquearon la carretera que conduce de Tila a Yajalón, y para ello derribaron árboles.

 

En esa misiva, se refiere que el pasado 11 de abril entregaron una petición escrita dirigida al presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, y que incluso en febrero de este año de nueva cuenta viajaron a la Ciudad de México para hablar con Alejandro Encinas, titular de la Subsecretaría de Derechos Humanos y Población, la cual dirigió el oficio Segob/SDHPM/0683/2020, misma que fue remitida a la Comisión para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México. Pero no prosperó.

“CONDENAMOS LA VIOLENCIA”, RESPUESTA DEL ALCALDE

En un comunicado, Limber Gutiérrez Gómez, alcalde de Tila, condena estas agresiones como vías para resolver diferencias y demandar solución a los problemas sociales.

“Este Ayuntamiento es y será siempre respetuoso de los derechos de los pueblos indígenas, de sus formas de organización, sus territorios y de su resistencia histórica”.

Luego de hacer un llamado a la paz en la zona, el mismo primer edil deja en claro que la solución a la añeja disputa agraria entre los grupos está en manos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, “nadie puede estar por encima de la ley”, refiere.

Hasta el momento, ninguna autoridad, como la Guardia Nacional, se ha acercado a la zona de conflicto, a pesar de que la petición de los pobladores afectados era que esta instancia se acercara para poner orden.