El riesgo de sobreexplotación del acuífero de Apan, en Hidalgo –como establecen estudios técnicos publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF)–, señalamientos por posible reducción de impuestos y presunta falta de transparencia en la entrega de permisos a Grupo Modelo, quien pretende instalar una planta cervecera en la región del Altiplano, se discuten y analizan tanto en el Congreso del estado como en tribunales federales, por inconformidad de legisladores y ciudadanos.
Mientras en la Cámara se presentó una propuesta de exhorto para que el gobernador Omar Fayad Meneses, así como la Comisión Nacional del Agua (Conagua), transparenten los permisos otorgados para la explotación del acuífero, habitantes de ese municipio se ampararon contra la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), al argumentar que se pretende violar su derecho humano al agua con el asentamiento de la planta cervecera.
Proponen ''candado'' para gastos excedentes en Hidalgo
En el acuerdo por el que se da a conocer el resultado de los estudios técnicos de las aguas nacionales del acuífero Apan, clave 1320, en el Estado de Hidalgo, Región Hidrológico-Administrativa Aguas del Valle de México, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 11 de agosto de 2016, se advierte que, de no establecerse a corto plazo un ordenamiento que controle la extracción de agua, ésta podría acabarse sin la capacidad de renovación natural.
Además, enfatiza: “el acuífero tiene una disponibilidad media anual de agua subterránea limitada para impulsar el desarrollo de las actividades productivas. El incremento de las actividades agrícolas y de la población, exigirá cada vez mayor demanda de agua para cubrir las necesidades básicas de los habitantes e impulsar las actividades económicas en la región”.
Por este motivo, alerta que que, ante un posible aumento en la demanda en los volúmenes de agua extraídos, “se corre el riesgo de que la extracción se incremente y rebase el volumen máximo que puede extraerse para mantener en condiciones sustentables al acuífero, generando la sobreexplotación del mismo, situación que pone en peligro el equilibrio del acuífero, la sustentabilidad ambiental y el abastecimiento para los habitantes de la región, impactando a las actividades productivas que dependen del agua y al medio ambiente”.
Amparos y cuestionamientos
Promovidos por habitantes que, afirmaron, desconocen cómo se garantizará el abasto de agua, además de que dijeron no tener acceso a la autorización de impacto ambiental para la operación de Grupo Modelo, a quien incluyeron como tercer interesado, siete amparos fueron turnados a los juzgados Cuarto (tres), Segundo (uno) y Primero (tres) de lo Civil del Vigésimo Noveno Circuito, con sede en el estado.
El derecho al agua de quienes viven cerca de donde se instalará la planta, en Apan, es el argumento principal; sin embargo, el acuífero del que se tomará el líquido cubre una extensión de 733.2 kilómetros cuadrados y comprende parcialmente también a los municipios de Almoloya, Tepeapulco, Emiliano Zapata y Tlanalapa, según el acuerdo publicado en el DOF.
Derivado de la inconformidad social, en la onceava sesión ordinaria de la LXIV Legislatura, el diputado morenista Rafael Garnica Alonso propuso el asunto “Conservación del acuífero de Apan”, con el que pidió exhortar al gobernador para que informe de manera pormenorizada a esta soberanía y haga pública la información sobre los estudios que las dependencias y/o entidades a su cargo tomaron en cuenta para autorizar la construcción y funcionamiento de la planta cervecera de Grupo Modelo, el cual se turnó a la Comisión de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural Sustentable.
La alusión en tribuna al mandatario y al proyecto derivó en la réplica de la priista Mayka Ortega Eguiluz, quien consideró que la exposición de motivos para instar al jefe del Ejecutivo a transparentar la información contenía un alto grado de ambigüedad y argumentó que en casos como la cebada sólo se utiliza agua de lluvia.
La asambleísta, exsecretaria del Trabajo y Previsión Social en el quinquenio de Francisco Olvera Ruiz, afirmó que los estudios de la Conagua garantizan el suministro del líquido y una reserva de 30 por ciento.
Después, el presidente de la Junta de Gobierno del Congreso, Ricardo Baptista González, añadió al tema el presunto “regateo” que Grupo Modelo intenta en el pago de servicios como el predial al ayuntamiento de Apan, lo cual, aseveró, supo tras una reunión con funcionarios municipales.
La empresa, añadió, también pretende pagar menos por la licencia de construcción, al ofrecer cinco millones de pesos a la alcaldía.
Remarcó que su grupo parlamentario, Morena, que es mayoría, no están en contra de las inversiones en la entidad, pero acotó que la información que se conoce hasta el momento sobre la planta es insuficiente, además de reiterar la garantía del agua a los pobladores de la región.
Como respuesta, en una conferencia de prensa cuya convocatoria fue replicada desde la cuenta institucional del gobierno de Hidalgo, el vicepresidente de proyectos de capacidad y expansión del Grupo Modelo, Daniel del Río, dijo que el proyecto de instalar su octava planta cervecera está sustentando y no implica sobreexplotación del acuífero.
“Nosotros hemos cumplido con todo lo establecido y nos deja claro que estos miedos, si los hay, son infundados, sea de la población o de cualquier actor”, declaró.
Para elaborar un litro de cerveza, indicó, utilizarán 2.7 litros de agua. Asimismo, especificó que el objetivo es generar 12 millones de hectolitros de producto; no obstante, contrapuso que la inversión es de 14 mil millones de pesos.
Del Río también negó pedir reducciones de pago al ayuntamiento de Apan.
¿Qué dicen los estudios técnicos?
Los estudios técnicos en los que se sustenta el acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación advierten en el apartado ocho, titulado Problemática, que está ubicado en una región con clima templado húmedo o subhúmedo, en la que se presenta una precipitación media anual de 628 milímetros, mientras que la evaporación potencial media anual es de 1,550 milímetros anuales, lo que indica que la mayor parte del agua precipitada se evapora y que el escurrimiento y la infiltración son reducidos.
“Dichas circunstancias, además del posible incremento de la demanda del recurso hídrico para cubrir las necesidades básicas de sus habitantes y seguir impulsando las actividades económicas de la misma, y la limitada disponibilidad media anual de agua subterránea en el acuífero, podría generar competencia por el recurso entre los diferentes usos e implica el riesgo de que se generen los efectos negativos de la explotación intensiva del agua subterránea, tanto en el ambiente como para los usuarios del recurso”.
El dictamen enfatiza que existe el riesgo de que el incremento de la demanda de agua subterránea genere los efectos perjudiciales causados por la explotación intensiva, tales como la profundización de los niveles de extracción, la inutilización de pozos, el incremento de los costos de bombeo, así como el deterioro de la calidad del agua subterránea, por lo que, insiste, es necesario prevenir la sobreexplotación, proteger al acuífero de un desequilibrio hídrico y deterioro ambiental que pudiera llegar a afectar las actividades socioeconómicas que dependen del agua subterránea en esta región.
Los efectos negativos, especifica, serían el abatimiento de los niveles de agua subterránea, con la afectación a los ecosistemas asociados, la inutilización de pozos, el incremento de costos de bombeo, deterioro de la calidad del agua subterránea, “situación que podría convertirse en un freno para el desarrollo de las actividades productivas que dependen del agua subterránea, lo que impactará negativamente en el ambiente y en el abastecimiento para todos los habitantes”.
mvf