MORELOS (La Silla Rota).-A pesar de que un informe alertaba sobre la pertenencia de los hermanos Lino y Rodolfo Adame Sotelo al grupo criminal Guerreros Unidos, las autoridades penitenciarias de Morelos acataron la orden de una Jueza federal y los pusieron en libertad.
En un video el Comisionado Estatal de Seguridad de Morelos, Alberto Capella Ibarra, dijo estar indignado y preocupado por la decisión de la Juez de liberar a siete de los 18 detenidos, entre ellos los dos presuntos integrantes de Guerreros Unidos.
Capella dice que uno de los liberados es presuntamente jefe criminal de la organización criminal denominada Los Linos y que cuenta con antecedentes penales por los delitos de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, Contra la Salud en el Estado de México y en el estado de Guerrero, además habla sobre la existencia de líneas de investigación de autoridades federales y estatales que lo señalan como integrantes de la delincuencia organizada.
A pesar de estos indicios, Los Linos fueron liberados por las autoridades penitenciarias de Morelos.
Sin embargo, desde el 3 de febrero de este año Alberto Capella Ibarra asumió el control operativo de los centros de reclusión del Estado a través de la Comisión Estatal de Seguridad al implementar el modelo policiaco de Mando Único en las cárceles de la entidad.
La madrugada de ese día el mismo Comisionado informó que la medida tenía como objetivo generar un mayor control y seguridad al interior de los penales del Estado.
“A partir de este momento todo el esquema de protección, todo el esquema de custodios y la protección de las instalaciones del Sistema Penitenciario Estatal pasan a formar parte del Esquema de Mando Único Estatal, esto con el objetivo de apoyar todas las labores que tengan que ver con la protección de los internos, evitar cualquier situación relacionada con daños, fugas o circunstancias adicionales, el tráfico al interior de las penitenciarias, y establecer un mecanismo de apoyo que pueda generar un mayor control en este esquema tan importante para la seguridad pública como es el Sistema Penitenciario”, dijo Capella el 3 de febrero de este año.
Lucio Hernández, Coordinador estatal de Reinserción Social del Gobierno de Morelos, dijo que no contaba con los elementos suficientes para conocer el nivel de criminalidad de los detenidos por la Policía del Estado que fueron liberados por órdenes de una jueza federal.
El funcionario estatal, cuyas oficinas se encuentran en el mismo predio que el Centro de Reinserción Social “Morelos”, donde estaban detenidos Los Linos, agregó que no tuvo tiempo suficiente para aplicar exámenes de sicología y criminalística a los presuntos integrantes de Guerreros Unidos.
“Como hubo una medida en contra de la medida cautelar de prisión preventiva no tuve oportunidad de enviarlos a este edificio y por lo tanto no fue posible hacerles los estudios de personalidad correspondientes hasta el momento que el juez les dicta a siete de los 18 libertad, es decir, una medida cautelar distinta a la prisión preventiva.
“Dentro de la responsabilidad que a nosotros nos correspondió al interior del Cereso Morelos fueron sujetos a un sistema de alta seguridad en la que fueron disciplinados, atendiendo los protocolos de las medidas de seguridad de reinserción social, ahí no puedo determinar, yo insisto, el índice de riesgo criminal, alta peligrosidad o la baja readaptación social de cada uno de ellos”, expresó el Coordinador de Reinserción Social.
Los Linos fueron detenidos el 4 de marzo y permanecieron en reclusión hasta el 27 de mayo, es decir, casi 3 meses, hasta que la Jueza federal Karla Montes Ortega ordenó su liberación.