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Gasto a Salud en Puebla se fue a fiestas, tesis y licencias de manejo

De 2010 a 2018, Puebla recibió 31,295 mdp, mismos que se gastaron en fiestas del Día del Trabajador, estímulos por antigüedad, Día de las Madres y de Reyes

Escrito en ESTADOS el

PUEBLA.- El Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA) fue creado por el gobierno federal para atender a la población que no dispone de servicios de salud ni de seguridad social, pero en el estado se Puebla se ha destinado también a pagar ayudas para tesis, anteojos, licencias de manejo y hasta salarios de especialistas sin cédula profesional.

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Los Servicios de Salud del Estado de Puebla recibieron 31 mil 295 millones de pesos entre 2010 y mayo de 2020 a través del FASSA, de acuerdo con una revisión a los informes de fiscalización que hizo la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en el periodo comprendido entre los años 2010-2018.

El fondo, señala la ASF, fue constituido en 1998 para “apoyar actividades de protección contra riesgos sanitarios; la promoción de la salud y prevención de enfermedades; la mejora en la calidad de la atención y la seguridad en salud; así como el abasto y entrega oportuna y adecuada de medicamento.”

(Cuartoscuro)

La auditoría encontró que parte de los 31 mil 295 millones de pesos se malgastaron en celebraciones del Día del Trabajador de la Secretaría de Salud, estímulos por antigüedad, Día de las Madres y Día de Reyes en las administraciones de los ahora exgobernadores Mario Marín Torres, Rafael Moreno Valle Rosas, José Antonio Gali Fayad, Martha Erika Alonso Hidalgo y Guillermo Pacheco Pulido.

Las malas prácticas administrativas ocasionaron que desde que inició la pandemia de coronavirus los Servicios de Salud del Estado de Puebla fueran tomados por sorpresa: médicos, enfermeras y camilleros protestan por carecer de insumos; pacientes se quejan de falta de medicamentos, se pospusieron las cirugías no urgentes; faltan camillas y personal.

Irregularidades, el pan nuestro de cada año

En el informe de fiscalización que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) hizo a los recursos que en 2010 la Federación transfirió a Puebla vía el FASSA, existe constancia de transferencias “a cuentas de otras fuentes de financiamiento por 19 millones 571 mil pesos; pagos a médicos especialistas sin que se encuentre el documento que los justifique como tal, por 1 millón 110 mil pesos”.

Entre los traspasos hechos a cuentas bancarias de otras fuentes de financiamiento, se encuentra uno a Oportunidades por 5 millones 279 mil pesos, y otro a Enseñanza por 13 millones 851 mil pesos, sin que hasta el momento de la auditoría existiera evidencia de su reintegro.

En las observaciones de ese año, la ASF presume “un probable daño o perjuicio o ambos por 19 millones 571 mil 285 más los intereses generados desde su disposición hasta su reintegro a la cuenta del fondo, por haber realizado traspasos de recursos a cuentas bancarias de otras fuentes de financiamiento, así como un probable daño o perjuicio o ambos por 1 millón 109 mil 983 por realizar pagos a tres servidores públicos como médicos especialistas sin contar con el documento que los acredite como tales (cédula de especialidad, título, diploma).

El mal ejercicio de los recursos del fondo siguió, por ejemplo en 2013: en la revisión de los 2 mil 643 millones 854 pesos transferidos ese año la ASF recuperó 6 millones 852 mil pesos, quedaron 29 millones 157 mil pesos por aclarar, y encontró que “cuatro servidores públicos carecen de la documentación que acredite la preparación académica requerida para el puesto bajo el cual cobraron (…), lo que generó pagos en exceso por 14 millones de pesos”.

Además, los auditores detectaron que los servicios de salud de Puebla destinaron recursos del FASSA 2013 por 6 millones 541 mil pesos para el pago de compensación del ISR de prestaciones laborales, como estímulos al personal, ayuda para tesis, ayuda para anteojos, ayuda para licencia de manejo, día del trabajador de la Secretaría de Salud, estímulos por antigüedad, día de las madres, y día de reyes, conceptos no convenidos en las Condiciones Generales de Trabajo de la Secretaría de Salud ni autorizado a financiarse con recursos del fondo.

Los recursos federales transferidos durante el ejercicio 2015 por concepto del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, fueron de 2 millones 984 mil 934 pesos, de los cuales la auditoría revisó una muestra de 2 mil 339 millones de pesos. En el transcurso de la revisión se recuperaron 9 millones 665 mil pesos y hubo siete observaciones que fueron solventada antes de la integración del informe que presentó la ASF.

En el ejercicio 2014 se encontraron pagos por 362 mil 800 pesos a una enfermera especialista “C” que carece de la documentación que acredite la plaza bajo la cual cobró durante ese ejercicio fiscal, así como 31 mil 500 pesos por concepto de medidas de fin de año a tres trabajadores con plaza de mandos medios, y 38 mil pesos por préstamos a la cuenta del FASSA 2015 y de los cuales no se presentó evidencia del reintegro de los rendimientos financieros generados. En el informe de fiscalización que la Auditoría Superior de la Federación hizo se indica que se recuperaron los 432 mil 300 pesos.

Las malas prácticas tuvieron su auge en el ejercicio 2011: los recursos federales transferidos vía el FASSA a Puebla fueron de 2 mil 226 millones 744 mil 500 pesos. En este año los Servicios de Salud del estado de Puebla destinaron 3 millones 080 pesos para pagar vacunas del ejercicio 2012 y 2 millones 265 mil 500 pesos para el pago de eventos y celebraciones, conceptos no autorizados para su pago con recursos del FASSA.

Además, en ese año se generaron pagos por 352 mil 600 pesos a personal con categoría de médico especialista, aunque seis de ellos carecían del título y la cédula profesional que los acreditara. Así como el pago de 428 mil 700 pesos por el sueldo de un servidor público comisionado a la Comisión de Arbitraje Médico, área no autorizada para financiarse con el fondo, y 17 mil 800 pesos para pagar actualizaciones e intereses moratorios por el pago extemporáneo de las retenciones del Fovisste-SAR y 25 mil 793 pesos para pagar el Impuesto Sobre Nóminas, ambos conceptos no financiable con los recursos del fondo.

En los centros de salud rural San Hipólito Xochiltenango, Nealtican, San Juan Cuautinchan y el urbano de Tepeaca, en 2011 se detectó que los Servicios de Salud del Estado de Puebla no tienen mecanismos que aseguren un manejo adecuado y transparente de los medicamentos e insumos médicos, no los tienen clasificados por fuente de financiamiento y carecen de la licencia sanitaria correspondiente.

En el centro de salud urbano de Tepeaca se detectó medicamento y material de curación caduco por 2 millones 472 mil 200 pesos, de los cuales no se proporcionó evidencia de los mecanismos de control aplicados para evitar su caducidad y del inicio del proceso de destrucción y confinamiento final.