TUXTLA GUTIÉRREZ. - La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) ha sido inoperante e incluso comparsa de las autoridades estatales y nacionales debido a que no emite, al menos desde hace un año, recomendaciones sobre una serie de casos de asesinatos de mujeres documentados en Chiapas, advirtieron hoy integrantes de la Red de Familias Víctimas de Feminicidio en esta entidad.
En una protesta pacífica en la Oficialía de Partes de esa instancia en el centro de esta ciudad capital, aseguraron que es urgente que intervenga la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para aplicar los protocolos y tratados internacionales suscritos por el Estado mexicano para ese motivo.
“Las autoridades encargadas de impartir y procurar justicia nos han fallado, y fallan desde la debida diligencia al momento de integrar la carpeta de investigación, por ende al investigar, al no recabar bien las pruebas, al no desahogar técnicamente bien las audiencias, fallan en todo”, advirtió Helena Morales, cuya madre y hermana fueron asesinadas en junio del año 2013.
Durante esta toma simbólica de la CEDH estuvieron presentes algunas de las madres o familiares de las occisas, entre ellas María Elba Alegría, quien lamentó que el feminicida de su hija Norma Cecilia López Alegría (asesinada en mayo de 2016) fuera liberado en 2018, y no haya una instancia que se encargue de este caso, ni de los dos hijos que dejó en orfandad.
LA IMPUNIDAD A FLOR DE PIEL
También estuvo ahí Sara Antonio Trinidad, originaria del municipio de Mapastepec, Chiapas, para exigir justicia por lo que ella consideró el crimen de su hija en marzo del año pasado, pues las autoridades, en este caso la Fiscalía General del Estado, argumentaron que se trató de un suicidio, “no ha sido investigado, en la carpeta de investigación hay muchas irregularidades; mi hija fue torturada, hay evidencias de ello”.
Ante esta situación, las denunciantes exigieron la renuncia del actual “ombudsman” chiapaneco, Juan José Zepeda Bermúdez, debido a que ha ignorado las peticiones de las 14 familias que integran dicha Red, es decir, que aún no emite recomendaciones para darles seguimiento a casos en los que ha habido irregularidades, e inclusive feminicidas que hoy gozan de libertad.
En su oportunidad, Selene Domínguez, activista chiapaneca, lamentó que las 14 familias que representan la Red hayan sufrido irregularidades en sus casos, y lo peor: en la mayoría de los mismos se integraran de forma errónea las carpetas de investigación. “Por eso la gente ya ni quiere denunciar”, evidenció.
Criticó de igual manera a la Coordinación de Alerta de Violencia de Género estatal, a cargo de María Mandiola Totoricagüena, pues no se sabe qué ha hecho entorno a todos los casos registrados de feminicidio.
LOS DATOS
De acuerdo con el Observatorio Feminista contra la Violencia hacia las Mujeres, en enero hubo 18 muertes violentas de mujeres (dentro de éstas 11 feminicidios y 1 suicidio), en febrero igual número de muertes (4 feminicidios y 3 suicidios), para marzo se registraron 11, de las cuales 3 fueron feminicidios, 1 feminicidio infantil y 3 suicidios.
Para abril, informó que hubo 2 feminidicios y 1 suicidio; mayo contabilizó 15 muertes violentas, de éstas 4 feminicidios, 4 homicidios y 3 suicidios y 4 posibles feminicidios. Solo en septiembre de este año ha contabilizado 2 feminicidios en la geografía chiapaneca.
Con base en datos del Secretariado Ejecutivo Nacional, a partir de abril de este 2020 hubo un alza en temas de violencias familiar y sexual no solo contra mujeres adultas, sino contra niñas y adolescentes.
bl