VILLAHERMOSA, Tabasco (La Silla Rota).- Con la exigencia que no quede impune su homicidio, este jueves fue inhumada la periodista Norma Sarabia Garduza, ejecutada la noche del martes a la puerta de su domicilio en la ciudad de Huimanguillo.
Familiares y amistades despidieron a la también estudiante de psicología en la Universidad de la Chontalpa (UPCH), y demandaron justicia por la muerte de quien también era madre de un adolescente.
Portando globos blancos, los dolientes acompañaron la carroza del velatorio con los restos de la comunicadora hasta su última morada en el panteón municipal.
La madre de la periodista asesinada, en medio del dolor contenido, expresó no desearle “el mal a los que le hicieron esto a mi hija”.
Aunque la Fiscalía General del Estado de Tabasco (FGET), igual que con otros crímenes, dijo que no descarta ninguna línea de investigación, personas presentes en el sepelio consideraron que difícilmente las autoridades esclarezcan este homicidio doloso y pasará lo mismo que la mayoría de los asesinatos que han quedado en la impunidad.
El homicidio de la periodista tabasqueña ocurrió el martes por la noche, la FGET entregó el cuerpo la mañana del miércoles, fue velado en la funeraria del DIF municipal y este día fue llevada al cementerio.
También puedes leer: Esta fue la última nota que escribió la periodista Norma Sarabia
Norma Sarabia Garduza, además de laborar para tres medios de Villahermosa, trabajaba en el área de control escolar en una escuela secundaria.
La FGET hizo el compromiso “por hacer valer el estado de Derecho en el desarrollo de las investigaciones, con el objetivo de esclarecer lo sucedido por el bien y la tranquilidad de la sociedad”.
En febrero pasado, cuando ejecutaron al periodista Jesús Ramos Rodríguez, director y conductor del programa La Región Hoy en la estación 99.9 de FM, la FGET igual prometió esclarecer ese crimen, que aún sigue impune.
Tampoco ha dado seguimiento a la investigación del asesinato del periodista Juan Carlos Huerta, ocurrido en mayo del 2018.
bl