Once muertos, 13 carpetas de investigación abiertas, siete procesos iniciados en la Comisión de Derechos Humanos (CDHEH) y dos detenidos es el saldo de 13 linchamientos en Hidalgo desde 2016. El último caso ocurrió el 8 de abril en el Hospital Regional del Valle del Mezquital, cuando un hombre acusado por habitantes de Ixmiquilpan de robar bicicletas en la colonia El Fithzi –al que retuvieron, obligaron a caminar semidesnudo y golpearon– murió a consecuencia de agresiones.
Por el último hecho, el secretario de Gobierno, Simón Vargas Aguilar, responsabilizó a la policía municipal, quien, afirmó, no actuó conforme al Protocolo de Actuación Policial para el control de Multitudes ante el riesgo de violencia colectiva, el cual fue publicado en el Periódico Oficial del Estado (POEH) el 2 de abril, seis días previos, y después de diez asesinatos.
Por este caso, por el cual el responsable de la política interna informó que hay dos detenidos, Derechos Humanos inició la queja de oficio CDHEH-IXM-0128-19, la segunda en este año, ya que el 11 de marzo había abierto el expediente CDHEH-TB-0078-19 por la privación de la vida de dos personas, que ocurrió un día antes, por habitantes de la comunidad Ejido Tlazintla, en Acaxochitlán, quienes las acusaban de intento de secuestro.
Aunque habían sido retenidas y golpeadas, la muerte ocurrió hasta que les prendieron fuego.
Hombre acusado por habitantes de Ixmiquilpan de robar bicicletas en la colonia El Fithzi
El 15 de agosto del año anterior, después de decesos por violencia colectiva, la Comisión emitió una recomendación general a los 84 municipios –entre los cuales, afirmó, encontró evidencias de posible omisión y negligencia para impedir que personas fueran privadas de la vida–, así como a la procuraduría, a la que pidió proceder contra funcionarios si no actuaron con base a protocolos para impedir los asesinatos.
El expediente incluía linchamientos de Huasca (CDHEH-VG-1208-18), Metepec (CDHEH-TD-0198-18) Chilcuautla (CDHEH-IXM-0301-18) y Tula (CDHEH-TA-0494-18); este último, cuando una pareja fue quemada viva en la localidad de Santa Ana Ahuehuepan –vulnerable por la operación de grupos dedicados al robo de hidrocarburo– tras ser señalada por lugareños como ‘robachicos’.
Linchamiento en Metepec
Metepec es el caso de cuatro hombres que fueron golpeados y rociados con gasolina el 27 de septiembre, luego de que pobladores los sacaran del área de retención primaria del ayuntamiento, donde estaban bajo resguardo, acusados de fotografiar a menores, entre ellos un Agente del Ministerio Público B del distrito Judicial de Tulancingo, en tanto que en Chilcuautla es un hombre murió a consecuencia de quemaduras en 85 por ciento de su cuerpo tras haber sido acusado de participar en el robo de un vehículo, el 23 de agosto.
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Sin embargo, después de esa recomendación general se suscitaron otros eventos en Actopan (CDHEH-VG-3169-18) y en Santa María Asunción, Tulancingo. Por éste, el organismo autónomo sí inicio queja por petición de parte por linchamiento, con folio CDHEH-TB-0336-18, aunque la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJEH) planteó una posible ejecución, porque, afirmó, encontró proyectiles de arma de fuego percutidos.
Este fue un triple homicidio del 5 de octubre por el que el acalde Fernando Pérez Rodríguez, en un comunicado previo a que la fiscalía diera a conocer su hipótesis, dijera estar consternado por “justicia por propia mano” en el barrio Tejanecapa, y aseveró que “comete un delito quien ingresa a robar como quien le quita la vida a otro”, debido a que la supuesta reacción de los pobladores fue por un hurto a casa habitación.
Sin éstas víctimas contadas en carpetas de investigación que tienen relación con linchamiento, son once las que han sido ultimadas entre 2018 y 2019.
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