Xalapa, Veracruz (La Silla Rota).-Derivado de la adjudicación directa por 36 millones de pesos que realizó el gobierno de Veracruz para la empresa farmacéutica Abisalud, relacionada con el superdelegado de Jalisco Carlos Lomelí Bolaños, se reveló que a la fecha existe un desabasto de medicamentos y material hospitalario del 45 por ciento en Veracruz.
Lo anterior fue expuesto por los propios diputados de Morena en el Congreso del Estado, pese a que autoridades como el secretario de Salud, Roberto Ramos Alor y el propio gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, han señalado públicamente que este no es un problema grave.
Este jueves en la tribuna del recinto oficial de sesiones del Congreso del Estado se discutió la contratación por parte del gobierno veracruzano de la empresa Abastecedora de Insumos para la Salud (Abisalud) S.A de C.V, misma que se hizo sin concurso o licitación.
Al respecto, la legisladora local de Morena y secretaria de la Comisión Permanente de Salud y Asistencia, Magaly Armenta Oliveros, dijo que el desabasto llega al 45 por ciento en la entidad.
“Con esta decisión (el contrato para Abisalud) llevó a que pasáramos de un 15 por ciento de abasto en medicinas y material hospitalario a un 55 por ciento de abasto en la actualidad; nos queda claro que no es suficiente todavía pero se sigue trabajando para que en el menor tiempo posible podamos tener mayor cobertura de los insumos de salud que más requiere la población veracruzana”, mencionó la legisladora.
Armenta Oliveros intentó defender la adjudicación directa que realizó la Secretaría de Salud, a cargo de Roberto Ramos Alor, por 36 millones 578 mil 757 pesos.
Mediante un anteproyecto, diputados del PAN criticaron la falta de transparencia del gobierno del Estado, recordando que la empresa farmacéutica está relacionada con el súper delegado de Jalisco, Carlos Lomelí Bolaños, según una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad.
Armenta Oliveros argumentó que el pasado primero de diciembre el gobierno estatal, encabezado por Cuitláhuac García Jiménez, encontró sólo 15 por ciento de abasto de medicamento al asumir funciones, tras dejar el cargo el panista Miguel Ángel Yunes Linares.
La legisladora aseveró que se trató de un serio predicamento, de ahí que el contrato a Abisalud se convirtió en un asunto que no podía esperar.
“Se recibió una dependencia en crisis, con almacenes llenos de medicamentos, pero caducados o próximos a vencer, lo cual puede llevar a acciones de responsabilidad de los servidores, por cierto, así como farmacias, hospitales y centros de salud en total desabasto”.
Según la legisladora en la Sexta Sesión Extraordinaria del Subcomité de Adquisiciones, el 18 de diciembre de 2018, se decidió otorgar la adjudicación directa a la empresa Abastecedora de Insumos para la Salud, por ser el proveedor que se comprometió a hacer la entrega inmediata de medicamentos antes del 31 de diciembre por cierre presupuestal.
Añadió que se trata de una empresa habilitada, con registro de ley y sin impedimento alguno para poder prestar estos servicios, en cuya acta constitutiva no aparece el nombre de Carlos Lomelí Bolaños, de ahí que no está relacionada legalmente con el súper delegado de Jalisco.
Oposición acusa opacidad
La diputada panista, María Josefina Gamboa Torales, señaló que las adjudicaciones directas permitidas por la Ley son por 101 mil pesos, no obstante el contrato que se otorgó fue de 36 millones de pesos, de ahí que no aplicaba una adjudicación y se debía implementar una licitación pública.
Por su parte el diputado del PAN, Rodrigo García Escalante, argumentó que si en la pasada administración alguien jugó con la salud de los ciudadanos los diputados del blanquiazul se sumarán a las denuncias correspondientes, pero criticaron que el gobierno busque llevar el tema de Abisalud “en lo oscurito”.
Incluso el coordinador del grupo legislativo “Del Lado Correcto de la Historia”, Gonzalo Guizar Valladares, lamentó que la contratación se haya realizado con una empresa de Jalisco, señalando que los empresarios veracruzanos están a la espera de una reactivación económica.
“Se está yendo la inversión en Veracruz, los empresarios veracruzanos están sufriendo, están cerrando negocios. Se acaban de cerrar negocios en Coatzacoalcos por la delincuencia y que compremos a una empresa ajena del Estado por una adjudicación directa no puede ser.
“Que aprendan los secretarios a tener respeto por los veracruzanos, le hacen mucho daño al gobernador, le están haciendo daño al gobernador porque él es el que paga las consecuencias porque ellos están a todo dar haciendo sus negocios, posiblemente”, opinó.
kach