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Ciudad Juárez, en crisis por saturación de migrantes deportados

Miles de migrantes son devueltos a ciudades fronterizas, sin embargo, el gobierno mexicano no está aportando ayudas a los comunidades locales para recibirlos

Escrito en ESTADOS el

Francisca, su esposo Leandro, y su hija de 10 años, caminaban de regreso. Hacia el sur.

En sentido opuesto al que buscaban llegar desde febrero: Estados Unidos.

Venían de regreso a Ciudad Juárez. A sus espaldas, del otro lado del puente, no solo dejaban pospuesta la posibilidad de un sueño, la esperanza de otro futuro, el escape posible de las pandillas y la violencia que los hicieron huir de Santa Ana, en el occidente de El Salvador.

"Me quitaron a mi niño. Yo venía destrozada. No decía nada pero... me quitaron a mi bebé", cuenta Francisca.

"Imagínate, nunca nos habíamos separado y ahí en Estados Unidos me lo quitaron".

Poco antes de que ellos fueran devueltos a México, Manuel*, que cumplió 18 años en mayo pasado, fue apartado de sus padres.

"Me dijeron que como ya tenía esa edad, no podía estar con nosotros como familia. No nos explicaron qué pasaría con él, solo se lo llevaron. Me llevaron a mi niño".

Manuel fue enviado —al menos eso creen sus padres con más dudas que certezas— a algún centro de detención, ¿en algún lugar?, ¿en alguna ciudad?, ¿en algún estado distante?

(Reuters)

"No nos dijeron a dónde lo llevaban, qué le iban a hacer. No hemos vuelto a hablar con él y van dos meses casi. Yo solo quisiera saber cómo está, si está comiendo, si se siente bien. Yo solo espero que esté bien, donde quiera que esté", dice Francisca a BBC Mundo.

Cuando los llevaron de regreso, Leandro, Francisca y su hija menor atravesaron otra vez el pórtico de dos bocas al final del puente, una de las entradas más concurridas a uno de los lugares más peligrosos de México. Ciudad Juárez.

Han retornado a 7 mil migrantes a Ciudad Juárez 

Según datos del Instituto Nacional de Migración (INM) son más de 7 mil migrantes retornados a Ciudad Juárez por el gobierno de los Estados Unidos.

Pese a que en esta ciudad existe una red de 16 albergues para migrantes, ni el municipio ni el estado tienen instalaciones para recibirlos, de acuerdo con datos obtenidos por el COESPO (Consejo Estatal de Población.

(Cuartoscuro)

En esta red hay mil 400 migrantes albergados, y que en la Casa del Migrante hay 670 personas refugiadas, su máxima capacidad, al igual que el resto de los santuarios.

Sin embargo, pese a la saturación, Leandro, Francisca y su hija tendrán que esperar aquí hasta octubre próximo, cuando una corte de Estados Unidos escuchará su caso de asilo.

El proceso puede tardar pocas semanas o más de un año y, hasta este mes.

"Mi hijo está preso. No sé en qué condiciones está. Y es triste, pero por lo menos sé que está en un lugar donde no lo van a robar, que no corre el peligro que mi niña, que nosotros, aquí, en Juárez", dice Leandro.

"Lo que está pasando es que muchos son devueltos a ciudades que están entre las más peligrosas de México, el gobierno federal mexicano no está aportando ayudas a los comunidades locales para lidiar con este problema y los migrantes terminan expuestos a peligros y condiciones bien extremos", afirma Ariel Ruiz, experto del MPI.

"¿Cuánto quieres por tu hija?"

Leandro cuenta que ese día sintió el mayor temor de su vida. Dice que fue como un escalofrío, un rayo helado que le estremeció todo el cuerpo.

Fue un par semanas después de que los retornaran a México.

Estaba en la calle con su esposa y su hija. Andaban de un lado a otro buscando algún trabajo, algo que hacer, una tarea que les diera un poco de dinero, de comida, para la noche.

Terminaba junio y una nata hirviente lo cubría todo: el bochorno sin misericordia del verano del desierto.

"Entramos a comprar agua en un barrio cerca de la frontera, porque ya estábamos muy cansados por el calor. Allí se nos acercó un sujeto. Nos preguntó que qué hacíamos allí".

-Pues mire, estamos buscando trabajo, algo que podamos hacer- le respondió, según su testimonio.

-¿Y para qué busca trabajo? -volvió a preguntar el hombre- ¿No ve que carga dinero en sus manos?

Francisca recuerda que de momento no entendió, pero sintió algo raro, como un sudor repentino en la nuca, un temblor que le remeció algo muy adentro.

-Tienes dinero en tus manos- repitió el hombre.

Luego lo aclaró todo con un dedo de la mano. Señaló a la niña, de 10 años.

-¿Cuánto quieren por ella?

Leandro no sabe qué le respondió. Cree que le dijo que si estaba loco.

Recuerda que miró desconcertado a Francisca, que apretó muy fuerte la mano de su hija, que se dieron vuelta, apuraron el paso, casi corriendo, tan rápido como le dieron los pies.

Unos metros más adelante, miraron hacia atrás y vieron que el hombre los seguía: hablaba por teléfono y luego otra persona se le unió en un carro.

Allí, de ese lado de la frontera, ya se acababan las casas y frente a ellos se abría un descampado. No había nadie más y los dos hombres avanzaban hacia ellos.

Fue entonces, dice, cuando decidió cruzar el río.

"O nos lanzamos aquí o me la quitan", pensó.

Tomaron por un lado medio seco, un vado del río Bravo, y le pidieron ayuda a la patrulla fronteriza de Estados Unidos que hacía su ronda.

"Nos llevaron detenidos de nuevo. Nos metieron a la hielera otra vez. Y a los pocos días, nos volvieron a regresar para Juárez".

"No nos creyeron y, por segunda vez, nos regresaron aquí".

Condiciones inhumanas para migrantes en el país

De acuerdo con las bases de la política negociadas entre la Casa Blanca y el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, México se compromete a ofrecer a los migrantes "todas las protecciones humanitarias apropiadas por la duración de su estancia", pero no es así.

"Muchos están viviendo en las calles, están durmiendo en los vagones de los trenes, en las paradas de camiones y también se están dando situaciones en las que muchos están siendo víctimas de extorsiones", dice el secretario de Seguridad Pública de Ciudad Juárez.

El funcionario también asegura que "se pueden convertir en un blanco del crimen organizado. Son personas que necesitan dinero y las pandillas pueden aprovecharse de esas circunstancias".

Por su parte, el alcalde de Juárez, comenta que la ciudad no estaba preparada para lidiar con la cantidad de migrantes que han llegado o han sido retornados allí y que han generado, en su criterio, un problema para la comunidad.

(Cuartoscuro)

"La ciudad ha tenido que disponer recursos extraordinarios que no se tenían ni siquiera el presupuesto para atender sobre todo los migrantes, alrededor de 8 millones de pesos (unos US$ 4,20 millones) del 1 de enero a julio", comenta a BBC Mundo.

A México son retornados cientos de migrantes cada día a tres ciudades fronterizas de México, para esperar a que se resuelva su situación en el otro lado.

"Vivimos un futuro incierto, no sabemos qué va a pasar con nosotros. Estados Unidos nos ha separado, mi hijo está preso, nosotros aquí... Pero ahí vamos, pues, luchando, viendo cómo vamos a hacer... con la esperanza de algún día estar todos juntos de nuevo".