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Bonilla emprende ofensiva contra cervecera porque molestaba la casa de su hermano

A pesar de contar con todos sus documentos en regla, la Cervecería Insurgente es afectada por una ofensiva de la familia del gobernador de BC

Escrito en ESTADOS el

El gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, mantiene una pugna con la Cervecería Insurgente.

Sin aportar pruebas, Bonilla acusó a Cervecería Insurgente de tráfico de influencias y corrupción para obtener sus permisos; en contraparte, señalan al gobernador de cumplir el capricho de su hermano Alberto, de 78 años de edad, que no quiere una cervecería frente a su casa y negocio. De hecho fue el consanguíneo del gobernador quien alertó de lo que sucedería a los productores de cerveza artesanal.

Las quejas del hermano del gobernador surtieron efecto, ya que el Ayuntamiento de Tijuana ha dejado sin operación a la empresa por diversas trabas, aunque cuenta con todos los permisos, publica ZETA.

Alberto Antonio Bonilla Valdez, hermano mayor de Jaime Bonilla, tiene 78 años y desde 2003 un negocio de aire acondicionado llamado “Equipo Eficiente de Japón” -lugar en el cual también reside-, ubicado sobre la misma calle que la cervecería artesanal.

Los hermanos Morales, Iván y Demián, así como su madre, María del Rosario Pérez Quezada, comenzaron a producir cerveza artesanal en 2010; y cuando se convirtió en un negocio redituable, se dedicaron a hacerlo de manera permanente y con los documentos en regla.

“Es un terreno mío que yo usaba como estacionamiento, después decidimos iniciar la construcción y hacerlo ya en grande. A partir de 2013, se obtuvo el permiso de uso de suelo para el lote 004 manzana 58. El tema de ‘microcervecería’ no existía en ese tiempo”, comentó a ZETA María del Rosario Pérez Quezada, quien figura como dueña de Insurgente.

Este negocio recibió en julio de 2012 el dictamen de factibilidad de uso de suelo, el cual considera que este domicilio es compatible para “Microindustria Artesanal”, en la modalidad de Elaboración de Cerveza Artesanal.

El documento cuenta con la firma de Martha Adriana Romero Albarrán, encargada de despacho del Departamento de Uso de Suelo, en la administración de Carlos Bustamante Anchondo; y fue ratificado en 2013 por Rafael Valdivia Reyes, con el mismo cargo, pero en el periodo de Jorge Astiazarán Orcí.

Ya para enero de 2018, obtuvo el dictamen de uso de suelo para microindustria de Elaboración de Cerveza (Microcervecería) en el predio propuesto, con el folio 1352288 y el número de expediente 4501/2013, autorizado por Corina López Zúñiga, jefa del Departamento de Uso de Suelo y quien fue inhabilitada en abril del mismo año -para desempeñar un cargo público- por entregar permisos de construcción a gaseras, después de publicada una moratoria contra las mismas.

Aún era gobernador electo, el 31 de agosto pasado, cuando Bonilla ya había mandado clausurar el negocio cervecero arguyendo que los vecinos se quejaban por el ruido.

Sin embargo, el real quejoso era Alberto Antonio Bonilla Valdez, vecino comercial y residencial de Cervecería Insurgente, quien tuvo tres conversaciones previas con los dueños y con quien estaban -aparentemente- en buenos términos, aunque ese ánimo de conciliación sólo duró unos días.

A los 5 días de tomar Morena la administración municipal, llegó un equipo de Bomberos, Protección Civil, Reglamentos y demás dependencias, argumentando que debían clausurar el lugar, pues no contaban con los permisos y requerimientos necesarios.

Cada vez que resolvían un problema, llegaba otra dependencia con otra clausura para no dejarlos trabajar; incluso no les daban días para cubrir la falta, como sí sucedió con Teorema Lúdica. La clausura era inmediata, esa era la consigna, detalla ZETA.