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Aumentan desapariciones de infantes y adolescentes chiapanecos

En lo que va del 2020, han desaparecido 160 niños, niñas y adolescentes en Chiapas, de los cuales solo 27 fueron encontrados

Escrito en ESTADOS el

Tuxtla Gutiérrez.- En lo que va de este año, 2 menores de edad desaparecen cada 3 días en territorio chiapaneco, cifra que sin duda se duplicó comparado con el 2019, el cual cerró con 183 casos, de acuerdo con los datos de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Para la organización “Melel Xojobal”, con sede en San Cristóbal de Las Casas, es preocupante que, hasta este séptimo mes, hayan desaparecido 160 niños, niñas y adolescentes en la entidad, de los cuales solo 27 ya fueron encontrados. De esa cantidad, especifica, el 21 por ciento se trata de indígenas y alrededor del 88% son niñas y adolescentes mujeres.

Lo peor de todo, advierte Jennifer Haza, directora de esa AC enfocada desde hace 23 años en velar por los derechos de los niños, niñas y adolescentes trabajadores, es que la cifra de secuestrados sería mayor y es mínima la cantidad de esos menores que ya fueron hallados, como sucedió el año pasado con solo 15%.

El último caso que, incluso, ya tocó el mandatario federal Andrés Manuel López Obrador en su conferencia de prensa es el del bebé Dylan Esaú Gómez Pérez, secuestrado por una niña el pasado 30 de junio por la tarde en el Mercado Popular del Sur (Merposur) del Pueblo Mágico San Cristóbal.

(Cuartoscuro)

De hecho, la búsqueda del niño provocó que, hace apenas unos días, la misma FGE hallara en una vivienda de esa misma ciudad a 23 menores de edad de rasgos indígenas, entre éstos 3 lactantes, quienes se presume estaban en calidad de plagiados y, como se ha informado, los obligaban a trabajar en las calles. Según la autoridad, se presume que es parte de una red de trata. 

Con base en el Inegi, Chiapas es el estado con mayor población infantil del país: 4 de cada 10 personas son menores de 18 años; del total, 30% es de origen indígena, el 85% vive en pobreza. De continuar con la pandemia, calcula “Melel Xojobal”, la cifra llegaría a 93 puntos porcentuales. 

Es decir, agrega, “frente a estas condiciones de desigualdad, ese sector, sobre todo el indígena, ve vulnerados sus derechos de forma cotidiana”.

Pudieran ser más de 300 desaparecidos

Para Jennifer Haza, que se hable de que la FGE desmanteló una red de trata en la misma ciudad sancristobalense les parece un diagnóstico “muy apresurado, aventurado, impreciso, y aunque reconocemos su trabajo y el de otras instancias, creo que se tiene que investigar más, es decir, si hay un reporte de secuestros, desapariciones, o si hay alguna relación de parentesco con las mujeres (3 hoy están detenidas por ese suceso) que los tenían, entre otros datos esenciales”.

Lo que sí hay que analizar, dice, es que si se suman los reportes que hay de desaparecidos, se hablaría en estos momentos de más de 300 niños, niñas y adolescentes en esa condición, solo en Chiapas.

“Este registro lo empezamos a hacer de manera más puntual a partir del año pasado, y también porque hay más disponibilidad de datos públicos de la Fiscalía”, advierte la también integrante de la Red de por los Derechos de la Infancia en México, cuyo panorama es peor: a diario desaparecen hasta 7 menores de edad a nivel nacional. 

Caso Dyla, un parteaguas para la justicia

Tras enterarse del caso de Dylan Esaú, Alicia Guillén Hernández se animó para, por enésima vez, acudir a la Fiscalía de Desaparecidos y preguntar por el caso de su hijo Eduardo Meza Guillén, secuestrado en la colonia Francisco I. Madero de Tuxtla Gutiérrez el pasado 21 de enero del año 2012. Hoy “Lalito”, como le dice de cariño, tendría 14 años de edad.

Para la madre de 56 años de edad y quien ha pisado morgues, hospitales, comedores, fiscalías e incluso otros estados y países, no hay descanso incluso en medio de la pandemia por la covid-19, tan es así que su caminar ha acompañado otras protestas como el de la misma familia LeBarón, la cual sufrió un ataque armado por parte de la delincuencia organizada hace apenas unos meses en el Norte del país.

Incluso, dice, “el mismo presidente Andrés Manuel ya nos dijo que éramos revoltosas solo porque buscamos a nuestros hijos, pero no me importa, yo solo quiero hallar a mi muchachito, porque tengo que la esperanza que está vivo”.

Lo que más lamenta —afirma— es que su caso está prácticamente archivado en la actual administración y con el fiscal general, Jorge Luis Llaven Abarca, no ha recibido ningún tipo de respaldo. 

“He gastado mucho dinero en la búsqueda, me he movido por donde no tiene ni idea, tanto que a la misma Fiscalía les dije que había pistas de mi hijo, que estaba al parecer en Panamá, como trabajador de una pizzería, pero no se movieron”, advierte la mujer, quien de igual manera “tocó” las puertas en Palacio Nacional e inclusive se mantuvo en huelga de hambre en la Secretaría de Gobernación en la Ciudad de México.

Sin embargo, afirma que, al ver a Juana Hernández en la búsqueda de su pequeño Dylan, se reanimó y presionó de nueva cuenta; “estamos destrozados, igual que esa madre de San Cristóbal, porque eso ya lo pasé”.

En estos momentos, el fiscal Jorge Llaven Abarca manifestó que, quien dé informes sobre Dylan, recibirá una recompensa de 300 mil pesos. Además, otra cantidad similar para quien también proporcione información sobre Ofelia “N”, originaria del municipio de Ixtapa, Chiapas, mujer que presuntamente lo tendría. 

En el caso de “Lalito”, su mamá asegura que, como el caso lo tomó la Procuraduría General de la República (PGR), a quien otorgue informes sobre él y de los plagiarios se le recompensará con 3 millones de pesos. “Pero no veo avances, es lo más triste, al menos con el fiscal de Chiapas, como que le dieron carpetazo”.

De acuerdo con “Melel Xojobal”, no se tiene que generalizar el que todas las niñas, niños y adolescentes que laboran en las calles son parte de explotación laboral, pues la mayor parte lo hacen por necesidad, es decir por la misma precariedad que viven con sus familias por la falta de mejores condiciones de vida.