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Aumentan robos, enfrentamientos y pérdidas por huachicol

Por los enfrentamientos con posibles ordeñadores falleció un policía de investigación el 1 de enero en Cuautepec de Hinojosa

Escrito en ESTADOS el

HIDALGO (La Silla Rota).- Las llamas alcanzaron 15 metros de altura tras el estallido de una camioneta con combustible presuntamente robado. La unidad, de nueve y media toneladas, quedó calcinada en el poliducto Tula-Palmillas-Toluca, ubicado en la comunidad de Santa Ana Azcapotzaltongo, en Tepeji del Río, Hidalgo, el 4 de abril.

La perforación al ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) mediante la cual se extrajo ilícitamente el hidrocarburo es una de las 112 que, entre el 1 de enero y el 30 de abril de 2017, ocurrieron en Hidalgo, la cuarta entidad más “ordeñada” del país, superior al Estado de México, donde el gobierno local y la Procuraduría General de la República (PGR) reconocen la operación de La Familia Michoacana en el hurto de gasolina.

Sin embargo, durante 2016, en Hidalgo se registró el mayor quebranto económico a Pemex por este delito, con 532 millones 138 mil 56 pesos. Esto representanta que de cada peso que la delincuencia organizada roba en territorio mexicano, 58.55 centavos los obtiene de los mil 163 kilómetros de ductos que atraviesan por 35 municipios estatales.  

Después de que presuntos huachicoleros se enfrentaron con elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) en la localidad de Bomintzha, en Tula, el gobernador Omar Fayad Meneses consideró, el pasado 4 de mayo, que la reacción armada contra los agentes, onceava en ese entonces desde enero, se debía a que estos grupos no eran combatidos anteriormente por las autoridades; a pesar de que, reconoció, “estaban muy enquistados” en el estado; por ello, previó más ataques durante operativos contra este delito.

“Sí va a haber enfrentamientos, no estamos tratando con damas de la caridad. Los agarran en la carretera y empiezan a dispararle a las autoridades”, dijo el mandatario respecto al incidente en el municipio de Tula, ubicado a 88 kilómetros de Pachuca, la capital.

“No va a ser un tema fácil. Estaban muy enquistados (los huachicoleros); estaban muy arraigados, creían que las cosas iban a seguir así y que podían seguirlo haciendo (extraer hidrocarburo) sin que hubiera reacción de la autoridad, y la reacción va a ser contundente. Vamos con todo”, expuso.

 Por los enfrentamientos con posibles ordeñadores falleció un policía de investigación el 1 de enero en Cuautepec de Hinojosa, cuando la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) realizaba un cateo.

 De los huachicoleros, ninguno ha sido abatido, pero uno murió calcinado tras una en un predio de la localidad de Santiago Tlapacoya, del municipio de San Agustín Tlaxiaca, el 25 de marzo.

Cien familias, además, fueron evacuadas porque la llama que produjo el hidrocarburo alcanzó una altura de 80 metros.

De acuerdo con información de Pemex, en 2016 detectaron 344 tomas clandestinas, pero, según la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), sólo hubo 32 personas detenidas. Lo anterior significa que para poner a disposición del ministerio público a un probable gasotraficante se debe perforar, en promedio, 10.75 ductos de los cuales se extraen diésel, crudo, gas y petroquímicos.  

lra