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Así fue el asesinato de un maestro a manos de policías

Rafael Pérez Hernández fue detenido por escandalizar semidesnudo en la vía pública, pero llegó a la Cruz Roja sin vida

Escrito en ESTADOS el

El pasado 10 de agosto, el maestro Rafael Pérez Hernández llegó en la caja de la camioneta de una patrulla a la Cruz Roja, en paños menores y sin vida.

El profesor había sido detenido por aparentemente escandalizar semidesnudo en la vía pública y, de acuerdo con Roberto Castro, director de la Policía Municipal de Saltillo, Coahuila, Rafael se mostró agresivo durante la detención por lo que lo oficiales tuvieron que someterlo.

“En el trayecto hacia la corporación siguió comportándose igual, por lo que él solo se causó las lesiones que le quitaron la vida”, añadió Castro en conferencia de prensa.

Sin embargo, informes periciales precisan que la causa de la muerte fue estrangulamiento.

Posteriormente se dio a conocer un video donde los oficiales llegan a la Cruz Roja con el cuerpo de Rafael semidesnudo y ya sin vida en la caja de la camioneta.

Tras darse a conocer los hechos, los tres policías relacionados fueron detenidos por homicidio calificado.

Según las versiones de un testimonio durante la audiencia de vinculación a proceso en contra de los tres policías Municipales acusados por el asesinato del profesor de música.

En las declaraciones, el testigo relató que al llegar a su trabajo como velador en la caseta que se ubica a la entrada del Centro Recreativo Sección 38, donde fue detenido, observó dos patrullas y se pudo percatar de que había tres policías golpeando a un hombre que estaba en ropa interior.

“Fueron más de 10 minutos los que duraron golpeándolo, a mí me dio miedo y me metí a la caseta, eran tres policías y lo tenían en la caja de una patrulla blanca, de las nuevas”.

Además dos compañeras de los acusados relataron que ellas fueron testigos del momento en que los tres policías abusaron brutalmente al maestro.

“Cuando ellas se acercan a la patrulla, uno de los oficiales les piden que verifiquen los signos vitales del detenido, quien ya había muerto, es cuando deciden llevarlo a la Cruz Roja”, relató el Ministerio Público.

Por su parte, los abogados de la defensa trataron de desmentir a las declaraciones de las mujeres policías, exigiéndole a la Jueza que ellas también fueran arrestadas por participar como cómplices de los oficiales que hicieron el ataque mortal hacia el maestro.

La Jueza se negó a esa petición ya que las mujeres policías no participaron en la agresión física contra el maestro.

Uno de los argumentos de la defensa dice que "los policías no actuaron conforme a lo que establece su reglamento de operación, ya que estaban cumpliendo con su deber".

Sin embargo, dicho argumento también fue desechado por la juzgadora, quien aludió a que no había nada que justificara la utilización extrema de la fuerza para someter a un detenido.

El policía Oscar Villegas Silva, principal responsable de la muerte maestro, fue interrogado por su abogado, quien le pidió que explicará cómo se había hecho ciertas lesiones que presentaba en la cara y el motivo de porque caminara cojeando.

El acusado declaró que no se encontraba bien de salud, ya que las lesiones que presentaba la víctima se las había provocado durante un presunto forcejeo durante la detención.

“Yo entré al campo donde estaba el finado, lo esposé de una mano y de repente sentí un golpe atrás en la espalda, fue duro, supongo que lo hizo con las esposas, de ahí no recuerdo nada, como que me aturdió”.

Así fue la declaración que dio el policía en su intento por justificar la fuerza ejercida para detener al maestro de música, quien según los dictámenes forenses murió a causa de un estrangulamiento, perpetrado por Óscar Villegas, de acuerdo a los datos de prueba presentados por el Ministerio Público.

En cuanto el testimonio del médico forense que hizo la necropsia, se determinó que Rafael recibió más de 58 golpes, mismos que le destrozaron órganos vitales como el hígado y los riñones.

La causa de la muerte fue estrangulamiento, cuando Óscar Villegas lo tomó por el cuello con su antebrazo y le obstruyó la respiración, causando una asfixia que lo llevó a la muerte, según se estableció en el dictamen.

La Jueza Rebeca del Carmen Monsiváis Pechir dictó el auto de vinculación a proceso a los tres imputados por el delito de homicidio calificado con ventaja.