Monterrey, N.L-. Durante tres días -casi consecutivos-, cinco personas fueron calcinadas en distintos hechos, en la zona metropolitana de Monterrey, presuntamente por integrantes de grupos criminales.
En los cuatro años del gobierno de Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”, los delitos de homicidios y narcomenudeo están al alza, pero según la Fiscalía General del Estado, otros delitos han bajado hasta en un 70 por ciento.
Primer hallazgo
Todo comenzó el martes, cuando una pareja fue calcinada en la cajuela de un vehículo en la colonia Roma, al sur de la Ciudad. Sus cuerpos fueron decapitados, sus cuerpos calcinados estaban en la cajuela de la camioneta y las cabezas en el asiento posterior.
Segundo hallazgo
El jueves, fueron encontrados dos cuerpos, uno en la parte del copiloto y uno más en los asientos traseros de un vehículo, en la colonia Independencia, ambos calcinados, al sur de Monterrey.
Tercer hallazgo
La madrugada del viernes, un cuerpo calcinado fue encontrado en Monterrey, ahora en el carril de acotamiento del área exprés de la avenida Constitución, la madrugada del viernes.
Los hechos se registraron a la altura de la calle Gregorio Torres frente a la escuela normal "Miguel F. Martínez", al oriente de la periferia del primer cuadro regiomontano.
El hallazgo fue reportado por personas que pasaban por el lugar, las que dijeron que hombres que viajaban en un vehículo compacto bajaron el cuerpo, rociaron combustible y le prendieron fuego.
Al lugar arribaron elementos ministeriales y municipales, acordonaron la zona para iniciar con las investigaciones correspondientes.
No cesa la violencia
Además en las últimas 24 horas tres personas fueron ejecutadas, dos en la colonia Madero en Monterrey y una en el municipio de Escobedo al norte.
Ante esta situación los coordinadores de las bancas del PAN, PRI y PT en el Congreso local insistieron en que ha fallado la estrategia en materia de seguridad e incluso, se atrevieron a coincidir en que nunca ha existido.
El sector privado insistió también a través del Consejo Cívico que se ha relajado la seguridad lo que llevó a aumentar nuevamente los índices de ejecuciones, robos y asaltos.
En el cuarto año de gobierno de Jaime Rodríguez algunos delitos tuvieron incidencia al alza, y en un comparativo con cifras de la Fiscalía General de Justicia del Estado, sin contar septiembre de este y el año pasado, debido a que los datos del noveno mes del 2019 no han sido actualizados, se observa la disminución de 14 de los 20 delitos más indicativos de la inseguridad, es decir, los de patrimonio, sexuales, familiares, contra la libertad, de la autoridad y contra la vida de las personas.
En los incrementos aparece en primer lugar el delito de homicidio doloso, que pasó de 617 en 11 meses del tercer año de gobierno a 961 en ese lapso pero del cuarto año de administración, para un aumento de 55.75 por ciento.
En segundo lugar está el narcomenudeo, que luego de 2 mil 410 casos en el tercer año, llegó a 2 mil 970, para un alza del 23.23 por ciento.
El feminicidio subió un 13.55 por ciento, al pasar de 59 a 67 víctimas mortales; el equiparable a la violación subió 14.02 por ciento, y los abusos de autoridad aumentaron 4.99 por ciento.
El decremento más significativo fue la tortura, con una reducción del 83 por ciento, seguido del robo de vehículos, con una baja en este cuarto año de gobierno de 33.68 por ciento; del robo a bancos y su disminución del 30.43 por ciento; del estupro, y su baja de 18.70 por ciento; y del robo a negocio, con su decremento del 18.53 por ciento.
Completan el top de los delitos a la baja, el rapto, con menos 12.24 por ciento; el robo a persona, con una reducción de 11.96 por ciento; el robo a casa, y su disminución del 11.08 por ciento; la privación ilegal de la libertad, con menos 10.52 por ciento; y la violencia familiar, con un decremento de 5.37 por ciento.
En el cuarto año de gobierno fueron a la baja la violación, con menos 4.19 por ciento de casos; el robo a escuelas, con una reducción de 2.70 por ciento; y el disparo con arma de fuego, con 2.05 por ciento.
Lamentable que el estado se convierta de nueva cuenta en una tierra de pelea entre cárteles de la droga, y que la ciudadanía viva aterrorizada con hechos violentos, recriminan organizaciones ciudadanas.