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Al igual que NL, Yucatán va por Objeción de Conciencia contra abortos

La iniciativa que analiza el Congreso señala que los médicos podrán negar atención médica por sus convicciones morales, éticas o religiosas

Escrito en ESTADOS el

Diputados panistas de Yucatán buscan condicionar la atención médica a los valores éticos y religiosos del personal de servicio de salud público. Activistas y colectivos alertan que se trata de una reforma que podría vulnerar a la población LGBTT+ y la salud reproductiva de las mujeres y adolescentes.

El proyecto del dictamen, presentado el 3 de abril pasado por los legisladores, especifica que “el personal médico perteneciente al Sistema Estatal de Salud puede invocar la objeción de conciencia cuando, en el ejercicio de la profesión, se presenten circunstancias que sean contrarias a sus convicciones morales, éticas o religiosas”.

En 12 años, por lo menos 42 mujeres yucatecas han acudido a la Ciudad de México a practicarse un aborto, debido a que en la capital está despenalizada esta práctica desde 2017.

Sin embargo, especialistas advierten que al no especificar los mecanismos para objetar estaría en riesgo el derecho a la salud de ciertos sectores de la población.

“La objeción de conciencia parte de un derecho de los prestadores de servicios a la libertad de conciencia y religión. Debe ser muy clara para no obstaculizar el ejercicio de derecho de otras personas, como los derechos reproductivos de las mujeres”, declaró Amelia Ojeda, coordinadora jurídica de la Unidad de Atención Sicológica, Sexológica y Educativa para el Crecimiento Personal (UNASSE).

La iniciativa logró ser regresada para su análisis el pasado 9 de octubre, gracias a una moción suspensiva propuesta por el Partido Movimiento Ciudadano.

“Hay que ser específicos y serios sobre el tema, la objeción de conciencia da pie a que incluso los médicos del interior del estado que no son formales en su horario, puedan justificarse ante una negligencia, argumentando que no atendieron a las personas por sus creencias”, dijo la diputada Milagros Romero.

Entre las propuestas de Movimiento Ciudadano para adicionar a la iniciativa sobresale elaborar un registro de los médicos objetores para conocer hasta qué punto pueden brindar sus servicios y contar con personal que pueda suplir las tareas.

La iniciativa podría ser discutida de nuevo en la Comisión de Salud y Seguridad Social en el siguiente periodo legislativo.

Cabe mencionar que la objeción de conciencia fue publicada el 11 de mayo del 2018 en el Diario Oficial de la Federación (DOF), como una modificación al Artículo 10 Bis de la Ley General del Salud, y fue objetada con un recurso de inconstitucionalidad que actualmente se encuentra en análisis en la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Apenas en octubre pasado, el Congreso de Nuevo León aprobó reformas a la Ley Estatal de Salud, en lo relacionado a la objeción de conciencia, para que personal médico y de enfermería puedan negarse a una atención con base a sus principios éticos y morales. 

La objeción de conciencia es una acción que, de ser aplicada, puede afectar a diversos grupos como los migrantes, la comunidad LGBTTTI, las personas indígenas, pacientes con VIH y las mujeres que solicitan un aborto, a quienes se les podría negar la atención médica.