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Abuelitos adscritos al Insabi de Morelos, bajo el riesgo del contagio

Pese a que son las personas más vulnerables en tiempo de pandemia, el INSABI no logra entregar las pensiones de sus derechohabientes sin riesgo alguno

Escrito en ESTADOS el

Un cubrebocas de baja calidad, gel anti-bacterial, una carpa y sillas a casi un metro de distancia entre cada una, es la medida que implementa la delegación de la Secretaria de Bienestar Social en Morelos en medio de la pandemia por el covid-19  para  realizar el pago de pensión  destinada a los adultos mayores y personas  con discapacidad. 

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Se trata del sector más vulnerable al coronavirus. Son ellos quienes acuden a la dependencia por su pensión con la promesa de que esta entrega se realizaría de manera segura y rápida, respetando las recomendaciones de la Secretaría de Salud  para  disminuir el riesgo de ser contagiados por el virus. 

• Sana distancia (un metro y medio mínimo de separación)

• Lavado de manos continuo o gel 

• Cero aglomeraciones y reuniones con un mínimo de 50 personas

Además de la aplicación de un nuevo esquema de entrega sin fichas y con un tiempo de espera y proceso de pago de no más de media hora en total. 

La cita fue a las 10 de la mañana para iniciar el pago de manera puntual y por orden alfabético.

Son las 10:45 de la mañana del martes 31 de marzo.

En la puerta de entrada hay una fila de al menos 10 personas y no guardan un metro y medio de distancia entre ellas.

El policía que está en la caceta de vigilancia tiene un cubre bocas, tan delgado que se observan sus dientes cuando habla, también sostienen un frasco del gel.

Con muy buena actitud hace lo que puede: saluda, pregunta el motivo de la visita y aplica  gel a cuanta persona pretende cruzar la puerta. 

Un grupo de jóvenes se remolinan a menos de 20 centímetros de distancia que entregan un cubre bocas e indican a cada persona la zona en la que debe tomar asiento. 

Son cerca de 400 personas, la mayoría de la tercera edad que están distribuidos en tres puntos de las instalaciones de la delegación Secretaria de Bienestar Social, situada en la colonia Chamilpa del municipio de Cuernavaca a la altura de la Carretera Federal Cuernavaca-Tepoztlán en el kilómetro 1+200. Algunas corrieron con suerte y les toco sombra, a otras, sol moderado y a otras, intenso. 

Al entrar de lado derecho se observa un primer grupo de personas de la tercera edad, se les observa sentados a casi un metro de distancia de su vecino y en fila india.

Su cubre bocas que parece de papel por lo delgado y frágil que esta, es el sello en estas oficinas. Algunas personas de la tercera edad no pierden detalle de quien entra y sale. Otras lucen aburridos o simplemente serios.

De lado izquierdo, hay otro grupo más que corrió con suerte y está bajo un techo que protege del sol, todos en silencio y sin movimientos. 

De pronto se escucha al fondo una conversación entre dos jóvenes que pertenecen a la dependencia y llevan la logística del operativo de pago.

- ¿Siguen llegando?

- Sí y los pagadores ni sus luces.

- ¿Todavía no llegan? 

-No, espero no tarden mucho 

Se refieren al personal de Telecom, la liquidadora encargada de realizar los pagos en el Programa que coordina la Secretaria de Bienestar Social.

Al llegar a la tercera zona habilitada como área de espera, en la que están cerca de 300 personas bajo carpas con sillas a casi un metro de distancia dispuestas para los pagadores- totalmente vacías.

Heriberto, habitante de la colonia Barona del municipio de Cuernavaca, tiene 70 años de edad y acudió a recoger su pago “por necesidad con ese dinero me ayudo para ir comiendo”, dijo. 

Dice lo citaron a las 9:00 de la mañana, pero llegó desde las 8:00 horas debido a que nunca se enteró de la modificación en el esquema de pago, es decir, nadie le explicó que ahora no entregarían fichas y que el pago iniciaría en teoría a las 10 de la mañana. 

“Ya tenemos un buen rato esperando y nada, ya tenemos hambre y sed”, agregó.
 

A él, como a otras personas más, le toco lugar en la carpa pero bajo un sol intenso. 

Rosita, pobladora de la colonia Santa María, comentó que a ella le dijeron que llegara con un poco de tiempo antes de las 10 para que saliera rápido “pero vea ni han empezado”. 

A las 11:15 horas arribaron las personas encargadas de realizar el pago y llegaron acompañadas de un par de policías. Eran dos mujeres que cargaban una bolsa cada una.

En lo que se instalaron y organizaron el arranque del pago dieron casi las 11:30 horas.

Personal del área de comunicación explicó que en esta ocasión “los pagadores” llegaron tarde porque no llegó a tiempo la seguridad que debe resguardarlas para evitar poner en riesgo el recurso de los beneficiarios. 

En promedio la espera fue de dos horas, considerando la hora fijada del pago que era a las 10:00 de la mañana. 

De esta forma la delegación Secretaria de Bienestar Social en Morelos, a cargo de Hugo Eric Flores Cervantes, incumplió con la promesa de garantizar condiciones de salud para los adultos mayores y personas con discapacidad que forman parte del grupo con mayor vulnerabilidad a covid-19.

De tal modo que no respeto la Sana Distancia al no establecer por lo menos un metro y medio entre persona y persona y violentó el número de personas permitidas en una reunión, manteniendo una aglomeración de 400 personas. 

Desde el pasado 26 de marzo inició el operativo especial de pago de las pensiones de los adultos mayores y personas con discapacidad.

De acuerdo a testimonios de personal de la misma dependencia, que para evitar algún tipo de represión, desde “el día uno, la dinámica ha operado exactamente igual sin medidas reales de prevención y se están poniendo en riesgo a todos los beneficiarios”.

A pesar de que el propio delegado Flores Cervantes aseguró que durante el operativo se implementaría de manera paralela una Jornada Informativa sobre el covid-19, La Silla  Rota en ningún momento observó que esto ocurriera. 

Preguntamos a las personas y dijeron que no les habían dicho ninguna información al respecto.  

También encontramos quejas sobre un trato inadecuado (hablan muy bajito los facilitadores y las personas de la tercera edad no escuchan) y prepotente cuando se les consulta alguna información. 

La versión oficial 

Alfredo Silva, coordinador del Programa Adultos Mayores en Morelos, aseguró “Nosotros  estamos acatando las medidas de seguridad de Sana Distancia, no hay 300 personas en un solo lugar, estamos dividiendo a más de un metro 50 de distancia a cada una de las personas en relación con su vecino y hemos dividido en diferentes áreas a las personas de tal forma de que no estén juntas”. 

Y aseguró que la cita fue a las 10:30 de la mañana, por lo tanto solo hubo 45 minutos de  retraso. 

Indicó que los beneficiarios están acostumbrados a llegar con mucho tiempo de anticipación debido a que en otras administraciones les daban ficha conforme iban llegando y después se iniciaba el proceso de pago.

“Anteriormente había personas que llegaban desde las cinco de la mañana y así en adelante y a pesar de que se les ha informado que ya no es el mismo esquema siguen llegando más temprano”, destacó. 

Indicó que ahora se les da cita por zona y  para enterarse de la fecha  deben llamar a los  siguientes números  7773-25-05-55, 7773-13-38-60 y 7343- 45-92-89 o escribir  al correo electrónico: adultosmayoresmorelos@bienestar.gob.mx

Y alertó sobre intentos de extorsión por parte de personas que han llamado haciéndose pasar por personal del Programa de Pensiones y aclaró que ningún personal de ese u otro programa realizan llamadas vía telefónica.  

“Es importante hacer la aclaración de que ningún compañero del programa de Adultos Mayoresno hacen llamadas telefónicas y les pedimos a todos los beneficiarios que llamen a las líneas de información o se dirijan vía correo electrónico, no atendían llamadas “, destacó.

Este operativo continuara hasta el día 9 de abril, por eso es importante que, para conocer  el día de su cita, lo investiguen vía telefónica o por correo para evitar salir dos veces de su casa debido a que en medio de la pandémica por covid-19 es recomendable que los adultos mayores no salgan de su casa.