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Abandonan a comunidades indígenas de Chiapas ante covid-19

Alfonso Díaz, comisariado ejidal de Nuevo Esquipulas Guayabal, lamenta que comunidades zoques fueron dejadas a su suerte por autoridades municipales y estatales

Escrito en ESTADOS el

TUXTLA GUTIÉRREZ.- En colonias del municipio de Rayón, los habitantes y autoridades enfrentan solos la pandemia del coronavirus. Todos los días hay contagios, hay muertos, pero nadie los reporta, nadie sabe de ellos, mientras que autoridades estatales minimizan la situación.

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Alfonso Díaz Ávila, comisariado del Ejidal de Nuevo Esquipulas Guayabal, Rayón, explica que la crisis no ha disminuido en este lugar, ubicado en la zona norte de Chiapas, donde habitan indígenas de la etnia zoque.

Cuenta que él sacó a por lo menos seis enfermos con síntomas de covid-19 y asegura que hoy en día siguen muchas personas enfermas. Sin embargo, para las autoridades de Chiapas, en ese lugar oficialmente sólo ha fallecido una persona, y la pandemia está controlada.

“Estuvo feo, del diario mueren en el municipio (de Rayón), todos los días, todos los días. En la colonia (Guayabal) 4 se fueron (murieron). La gente no creía, pero se empezaron a ir (morir). Ya cuando vieron que era grave es que se empezaron a quedar en casa, a ya no salir, a ponerse cubrebocas”, narra.

Díaz Ávila lamenta que comunidades zoques fueron dejadas a su suerte por las autoridades municipales y estatales. “Ayer como hoy, los pueblos zoque y maya en Chiapas, seguimos olvidados a nuestra suerte”.

“Estuvo fea la cosa, de que murieron, diario, diario. En un día se fueron tres personas, ya era muy preocupante. La gente no creía, pero se empezaron a ir (morir) y cuando vieron que la situación era grave comenzaron a comprar gel, alcohol, a usar cubrebocas, a quedarse en casa, vi que mucha gente hacía sus compras de despensa, por caja, era sorprendente, maíz por bulto”.

El comisariado ejidal recuerda que una ocasión llegó un muchacho de una comunidad con su papá, llorando, porque dejó a su hijo tirado, ya no podía respirar, y él se fue corriendo a buscar ayuda, pero el Dr. Simi abre a las siete de la mañana.

A veces es preocupante, no sé si porque nosotros, como autoridad, a veces quisiéramos hacer muchas cosas, pero hay ciertos límites que no te dejan hacer, que no puedes pasar, y te sientes impotente, cuando alguien da una información que no está aquí. Los síndicos no ven la realidad, no están en la presidencia

“No están en contacto con los médicos para que él pueda decir que en Rayón hay enfermos, asintomáticos, ellos no están en el municipio, no saben quiénes están enfermos”.

No hay quién nos apoye, quién nos ayude, pero de que hay enfermos, hay muchos enfermos, no se deben pronunciar los nombres, pero si hay enfermos

PREOCUPACIÓN Y FATALIDAD

El pasado 13 de abril, Samuel, un indígena de la etnia zoque de 54 años, habitante de la comunidad rural Francisco León, municipio de Ocosingo, se contagió de covid-19. Un día después que fue notificado se suicidó “por sentimientos de culpa, desesperación y no tener apoyo”.

Samuel recibió el pasado domingo 12 de abril, la notificación de “ser positivo a covid-19; el secretario de Salud de Chiapas, José Manuel Cruz Castellanos, lo dio a conocer en conferencia, al dar un informe de los contagios en el estado.

Alrededor de las 11:00 horas de la mañana siguiente, se dirigió al río que atraviesa la comunidad y se colgó de un árbol.

Ni la Fiscalía General de Chiapas, ni de la Secretaría de Salud habían llegado a la comunidad hasta las 18:00 horas de ese lunes.

“Y lo más preocupante es que ya hay personas que presentan síntomas. Brilla la ausencia del apoyo, del equipo médico para que se hagan los estudios y que esto pueda tener un control y que no al rato se haga una situación lamentable y que no podamos controlarlo. Es la desesperación aquí de la gente”.