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A 25 años de la primera barra; el origen en México

Pachuca y América se enfrentaban en la ronda inicial de la Copa México; oficialmente se presentó la primera “barra” en México

Escrito en HIDALGO el

PACHUCA.- La historia dicta: El jueves 25 de enero de 1996, en la tribuna Sur del Estadio Hidalgo, apareció el primer grupo de animación mexicano denominado “Barra”. Se hizo llamar la Ultra Tuza.

Pachuca y América se enfrentaban en la ronda inicial de la Copa México.

La idea de tener Barras en nuestro país, sin embargo, se gestó unos meses antes; para ser exactos, al 25 de junio de 1995. Ese domingo, los Tuzos perdieron la final por el ascenso a Primera División frente a un sorprendente Celaya. Después de empatar 0-0 en tiempo normal, los Toros daban la campanada en tiempo extra con gol de Amarildo Soarez.

Atrás de la portería donde anotó el brasileño, Andrés Fassi, director deportivo del club hidalguense, contempló la derrota con lágrimas en los ojos. “El estadio fue un cementerio, el ánimo de la gente se fue apagando conforme pasaron los minutos y no anotábamos”, recordaba el directivo sobre esa tarde.

CONEXIÓN TICA

Fassi, originario de Córdoba, Argentina, pensó que todo hubiera sido distinto si los aficionados alentaran desde la tribuna con mayor pasión, con el fervor de las Barras que él vio en su juventud durante los juegos de Talleres, en su tierra natal.

Unas semanas después encontró la respuesta.

Durante un viaje de pretemporada a Costa Rica, los directivos del Saprissa presumían que habían formado su propia Barra con personajes traídos desde Sudamérica.

El dirigente blanquiazul no sólo adoptó la idea sino que pidió conocer a los encargados del proyecto. Así contactó al chileno Eduardo “Lalo” González Tapia y al tico Jorge “Chino” Díaz Paredes.

Ambos fueron reclutados por Pachuca, mediante módico sueldo y pasajes de avión, para organizar la primera barra en México.

PRIMERA APARICIÓN

Durante finales de 1995 y principios de 1996, el “Lalo” y el “Chino” se encargaron de aglutinar a seguidores de los Tuzos para respaldar a su equipo de una manera “diferente”.

Reunidos en el estacionamiento del club, les enseñaron cánticos de inspiración sudamericana y la costumbre de saltar durante todo el encuentro; además, confeccionaron y pintaron las mantas que colocaron en la tribuna. “BARRA ULTRA TUZA” rezaba el primer trapo en azul y blanco, a manera de presentación.

Tras varios ensayos y algunas tonadas, hicieron su debut el 25 de enero de 1996, en ese juego donde Pachuca, de la Primera A, eliminó 1-0 a las Águilas dirigidas por Marcelo Bielsa.

El público quedó atónito con el comportamiento de los 300 aficionados que no pararon de lanzar arengas ni brincar a lo largo del encuentro.

La condición para ser de la Ultra era estar credencializado; entre sus beneficios estaban descuentos en costo de los boletos como local y en viajes a otras plazas.

GRABACIÓN DE CÁNTICOS

Hubo otros aspectos que sustentaron el surgimiento de la Ultra Tuza.

Fassi comprendió que necesitaban un cancionero para que las tonadas en la tribuna tuvieran rápida penetración entre la gente.

Así, en febrero de 1996, el Club Pachuca firmó contrato con el Estudio de Grabación Galad para la producción de un casete que contenía 18 canciones con los “éxitos” de la Barra. La mayoría, adaptaciones de cánticos sudamericanos.

El modesto estudio, que se ubicaba en el municipio de Mixquiahuala, era propiedad del maestro Severo Hidalgo, quien hizo los arreglos y la grabación. Junto a los músicos Pedro Cruz, Juan Andrés y Jorge Luis Arzaluz trabajaron casi veinte horas al día a lo largo de una semana para terminar la obra y la maquila de cuatro mil casetes.

El contrato de la producción ascendió a 31 mil 200 pesos de esa época.

PRIMER BOMBO

El chileno “Lalo” González permaneció poco tiempo en México. Encarriló el nacimiento de la Ultra Tuza y antes de un año regresó a su país.

La dirección del grupo quedó en manos del “Chino” Díaz por casi 15 años; sin embargo, otra responsabilidad muy especial recayó en el pachuqueño Sergio Pacheco Orozco, quien fue el primer mexicano responsable de tocar el bombo en la tribuna.

Pachuca compró el instrumento de la marca Pro-Mark, mismo que el joven aficionado aprendió a tocar para marcar el ritmo de los cánticos; tuvo la responsabilidad de ejecutar y cuidar el bombo durante varias temporadas en todos los estadios de Primera A y la Primera División, ante la mirada extrañada de autoridades y fanáticos de otros equipos que pronto fueron sumándose al furor por las Barras.

Pumas (Azul y Oro) y Atlas (La 51) fueron los siguientes conjuntos que contaron con su Barra, cambiando para siempre el ambiente en los estadios del futbol mexicano.



emh