NARCOTRÁFICO

Monstruos: el poder bélico y financiero de los cárteles en México

Los “monstruos” o “narcotanques” evolucionaron en diseño, fortaleza y poder de fuego; son los vehículos de combate de los cárteles de la droga en el país

Los “monstruos” o “narcotanques” evolucionaron en diseño, fortaleza y poder de fuego; son los vehículos de combate de los cárteles de la droga en el país
MONSTRUOS.Los “monstruos” o “narcotanques” evolucionaron en diseño, fortaleza y poder de fuego; son los vehículos de combate de los cárteles de la droga en el paísCréditos: Cuartoscuro
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Nacieron en 2010, cuando el Cártel del Golfo y Los Zetas innovaron con el desarrollo de los vehículos modificados. Primero, adaptaban camionetas robadas con blindaje artesanal, diseñado para soportar ataques de armas de alto poder. Después evolucionaron en diseño, fortaleza y poder de fuego. Son los “monstruos” o “narcotanques”, los vehículos de combate de los cárteles de la droga.

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Para su desarrollo, los narcos utilizan talleres clandestinos, donde realizan adaptaciones a los automotores, en su mayoría camionetas y SUV. Los cárteles blindan los automóviles con acero y vidrio antibalas.

En los últimos días, autoridades federales han destruido cerca de una veintena de “monstruos” o “narcotanques”, que son una muestra del poder bélico y económico, así como de la evolución de los carteles en México.

El 24 de julio, la Fiscalía General de la República (FGR) trituró 23 vehículos blindados, presuntamente al servicio de organizaciones criminales, según un comunicado. La demolición se realizó en instalaciones de la FGR de Reynosa, Tamaulipas, ciudad en disputa por organizaciones criminales.

Las fotografías difundidas por la FGR dejaban ver camionetas pickup adaptadas con placas blindadas, vidrios antibalas y torretas para ametralladoras, entre otros aditamentos de tipo militar. Estas camionetas se conocen popularmente como “monstruos” o “narcotanques”.

La FGR no mencionó los carteles a los que pertenecían los vehículos, pero los logos que se observaban en algunos de ellos tenían semejanza con el Cartel del Noreste.

 

 

Los 23 narcotanques representan solo una fracción de los 630 vehículos blindados confiscados por la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) desde 2018. Tamaulipas representa más de una tercera parte de los decomisos; de 231 vehículos acorazados confiscados por las autoridades en ese estado, 42 se clasificaron como “narcotanques.

 

 

El 26 de julio pasado, la fiscalía de Tamaulipas (FGJ) afirmaba haber expropiado y destruido 257 automotores a los carteles desde 2019. De esos, 163 eran “narcotanques” o “monstruos”.

PODERÍO BÉLICO

Un análisis de InSight Crime indica que el sorprendente número de “monstruos” o “narcotanques” incautados por las autoridades no solo demuestra el músculo financiero de los carteles, sino también la importancia de estos vehículos para infligir daño a grupos rivales o las autoridades gubernamentales.

 

 

El uso de camionetas modificadas como medio para controlar territorios estratégicos sigue siendo amplio, a pesar de que algunos de los grandes carteles están entrando en una era de producción de drogas sintéticas.

Estas drogas, como el fentanilo, pueden producirse en el centro de las grandes ciudades, pues requieren mucho menos espacio que la producción de marihuana, cuyo cultivo demanda cientos de hectáreas. Los carteles también fabrican metanfetaminas, otra droga sintética apta para la producción en laboratorios urbanos.

 

 

Sin embargo, el despacho de estas sustancias, especialmente la cocaína, fuera de México requiere el control de corredores de droga ferozmente disputados en todo el país. Aquí los “narcotanques” son invaluables para imponerse sobre la competencia y salvaguardar estos territorios.

Los vehículos blindados se encuentran por lo general en zonas azotadas por la violencia de los carteles. Tamaulipas y Michoacán están en el centro de una feroz disputa entre múltiples carteles, y se situaron como primero y segundo, respectivamente, en los decomisos de narcotanques.

 

 

 

 

 

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