Main logo

Mural de Marisela Escobedo mantiene viva su memoria y su historia

Marisela fue asesinada en diciembre de 2010 frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua; encabezó marchas para exigir justicia por el homicidio de su hija Rubí

Por
Escrito en ESTADOS el

CHIHUAHUA.- En agosto de 2008 asesinaron a Rubí Marisol, a sus 16 años, por su entonces pareja, el feminicida Sergio Rafael Barraza, quien después del crimen se deshizo del cuerpo en un tiradero.

TAMBIÉN LEE: "LAS TRES MUERTES DE MARISELA ESCOBEDO", UNA HISTORIA DE LUCHA

El asesino se declaró culpable y confesó el lugar donde había quemado los restos de la joven; sin embargo, las autoridades estatales lo dejaron libre por la presunta falta de pruebas para sentenciarlo.

Ante ello, Marisela, madre de la víctima, emprendió su propio movimiento por justicia: renunció a su profesión de enfermera para salir a las calles y exigir continuar con las investigaciones.


Sin embargo, el 16 de diciembre de 2010 fue asesinada frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, presuntamente por José Enrique Jiménez Zavala, El Wicked, miembro de Los Zetas, al cual se habría unido Sergio Rafael, el feminicida en cuestión.

Parte de esta historia, de Marisela Escobedo y la lucha de justicia para su hija Rubí, quedó plasmada en un mural plasmado en el exterior del Centro de Derechos Humanos para las Mujeres (Cedehm), en la ciudad de Chihuahua.

A Marisela la asesinaron en diciembre del 2010 frente al Palacio de Gobierno en esta misma ciudad. Y a la fecha, el contexto de violencia contra las mujeres no ha cambiado

Así lo expresó Ruth Fierro, directora del Cedehm, al encabezar el evento de develación del mural.

“Es mantener viva la memoria, la historia y su lucha. Y es para reconocer la digna lucha de las mujeres para acceder a la verdad y la justicia en este país, continuó Ruth”.

El mural está ubicado en avenida De La Junta y Juárez. Fue creado con el aval de la familia de Marisela y con el apoyo del Festival Internacional Nuestras Luchas y Cuarto Estudio.

El arte fue realizado por Yaneli Sara, Selene Mireles, Elías Rodríguez, Viviana Galaviz y Ned Solís, apoyados por varis voluntarios.

Para Yaneli Sara, el mural busca reconocer la lucha de Marisela y a la vez la historia de aquellas mujeres víctimas de la violencia. “Marisela es un ejemplo a seguir”.

En el mural está dibujada Marisela al centro, con un rubí en su pecho en forma de corazón, como simbolismo de si hija Rubí Frayre, por quien pidió justicia hasta el último día de su vida. También hay un grillo, debido a que a Rubí le gustaban las canciones de Cri-Cri en su infancia.

Los colores cálidos representan la luz y fuerza que daba a su paso, y en las velas hay figuras que representan a su familia, la esperanza, la búsqueda de la justicia, su vocación de enfermera y su perseverancia, explicó la artista.

 

 

 

 

rst