Durante los últimos dos meses, decenas de personas sin hogar, migrantes y adictos han tenido que enfrentarse, sin protección, al coronavirus en las calles de Tijuana. Pero ahora, en medio de los estragos económicos que la pandemia está dejando, el hambre también aprieta.
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Esto es notorio, por ejemplo, en la Casa de los Pobres A.C., donde han tenido que abrir sus puertas de lunes a domingo -cuando antes solo lo hacían de lunes a viernes- para seguir entregando hasta 1,200 comidas por día.
“La gente está aquí todo el tiempo y vimos la necesidad de ampliar nuestro servicio”, comenta Gudelia Betanzos Lara, una de las misioneras franciscanas que atiende el lugar.
Además, semanalmente también regalan despensas a familias de escasos recursos, que antes se trasladaban desde alguna de las colonias de la periferia, pero hoy no pueden salir de casa, por lo que son entregadas en sus domicilios.
Para esta tarea se apoyan en vecinos y familiares que trasladan los alimentos para evitar que mujeres y niños se expongan en la calle.
Y aunque cambia el número de personas que se presentan a recoger las despensas, la religiosa dice que cada ocho días están entregando arriba de 300.
Así que quienes acuden a la casa de asistencia son, principalmente, hombres que para desayunar hacen fila desde las 7:00 de la mañana.
En la banqueta, las cruces con cinta adhesiva les dicen dónde formarse para guardar la sana distancia y minimizar el riesgo de un contagio; también deben llevar cubrebocas, aunque quien no lo tiene recibe uno.
Salvador Molina, oriundo de Nayarit, vive en las calles de Tijuana desde marzo de este año. A veces recibe se alimenta en la Casa de los Pobres, otras en el Desayunador Padre Chava”, ubicado también en la zona centro.
“Ahí no importa, vayas pegado o como vayas, te dan comida”, comenta sentado en una banca junto a un pequeño envase con mezcal barato.
Lleva un cubrebocas negro que esconde un poco la suciedad por el uso excesivo y la falta de higiene, pero eso sí, agradece que no ha visto de cerca el coronavirus porque no duda de su letalidad.
Tiene 60 años de edad, luce sano y asegura que tiene todos sus documentos para establecerse, por eso confía en que encontrará trabajo y se podrá quedar a vivir en esta ciudad.
Escuché en la radio que ya se va a acabar esto. Yo sé que el virus va a seguir y va a ser como una gripe normal
Pero las cosas no parecen tan sencillas cuando la Secretaría de Economía y Desarrollo Sustentable de Baja California ha reconocido ya la pérdida de más de 30 mil empleos entre abril y mayo.
La hermana Gudelia Betanzos también dice que en la asociación civil están conscientes de lo que puede venir con todo ello, así que no piensan por ahora reducir de vuelta su horario de atención.
“Viene una situación económica muy difícil para todos, no nada más para la gente pobre de Tijuana”, comenta.
1 de 4, la pobreza histórica
La última medición del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) señalaba que 24.9% de los bajacalifornianos vivían en condiciones de pobreza, lo que se traducía en 907 mil residentes del estado en esa situación. De esa cifra, 59 mil no tenían ni para comer, pues estaban en pobreza extrema.
El mismo Coneval reportaba en su estudio dado a conocer en 2018, que un millón 696 mil personas en la entidad, vivían vulnerables por carencias sociales e ingreso insuficientes. Esta cifra representaba 46.6% de la población estatal.
Hace dos semanas, el Secretario del Trabajo y Desarrollo Social, Gustavo Hernández Vela, confirmó que un aproximado de 13 mil a 14 mil empleos directos, indirectos o eventuales registrados en el IMSS se han perdido o suspendido a consecuencia de la pandemia por covid-19.
Si bien es cierto ha habido una pérdida de empleo importante. ayer tuvimos una video conferencia con secretarios, gobernadores y funcionarios del gobierno de la República, donde el director general del IMSS, Zoé Robledo, hablaba de que en Baja California Sur se han suspendido el 10.6 por ciento de los empleos formales , un aproximado entre 13 mil a 14 mil empleos directos o indirectos eventuales o registrado en el IMSS, que se han despedido o se han liquidado o bien que se encuentran suspendidos porque la actividad esencial o la actividad no es esencial, como puede ser en el tema turismo
Con respecto a que se prevé un incremento de la pobreza extrema en el país según el análisis del Coneval, subrayó que Baja California Sur hasta antes del tema pandémico se encontraba en unos lugares importantes en cuanto a la reducción de su pobreza y evidentemente la pandemia ha venido a mover un tema en la parte laboral y económica.
Nosotros esperamos un tema ya de mitigación a través de sociedad gobierno, tratar de no perder esa parte que se tenía, Coneval había calificado como pobreza extrema en Baja California Sur cerca de 12 mil o 13 mil personas y es probable que en una reclasificación pudiera calificar otro porcentaje, estimando que la entidad pudiera incrementar en un 5 por ciento su pobreza dependiendo de las variables que se puedan dar en el tema económico y turístico