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“Los Ardillos”, la sanguinaria célula criminal que atormenta Guerrero

El cruel asesinato de 10 músicos en Chilapa es el reflejo de la violencia extrema que esta banda criminal suele utilizar

Escrito en ESTADOS el

Una llamada alertó a las autoridades de Chilapa, Guerrero, sobre un accidente vehicular que dos camionetas habían protagonizado en la carretera Mexicalzingo-Tlayelpa, era el 17 de enero del 2020.

Sin embargo, cuando las autoridades llegaron al lugar, el escenario era peor de lo que imaginaban. Encontraron los dos vehículos con 10 personas sin vida abordo, cinco de ellos totalmente calcinados y los cinco restantes parcialmente quemados.

Lo que se pensaba había sido un accidente se convirtió en realidad en una masacre. La decena de asesinados eran miembros del grupo musical “Sensación”, quienes fueron interceptados por un grupo armado, torturados, asesinados y calcinados.

La versión de la Fiscalía General del Estado de Guerrero y de los familiares de las víctimas coincide en que fueron brutalmente asesinados; los primeros hicieron referencia a las labores periciales, los segundos a los cuerpos que les fueron entregados en condiciones de tortura extrema, decapitados y mutilados.

Las autoridades de Guerrero señalan a una peligrosa célula criminal como los responsables de esta masacre: “Los Ardillos”.

Pero, ¿quiénes son “Los Ardillos”?

Documentos de la Fiscalía General de la República (FGR) en posesión de La Silla Rota detallan que “Los Ardillos” son una célula criminal derivada del cártel de los Beltrán Leyva.

Con la caída de cada uno de los principales líderes de la organización, principalmente de los hermanos Beltrán Leyva, el cártel se fracturó, creándose bandas criminales centradas en regiones en particular.

Del cártel de los Beltrán Leyva, según información de la FGR, emanaron siete, entre ellas “Los Ardillos”.

“Los Ardillos” operan en Guerrero, principalmente en la zona centro y en la región de la montaña, justo donde sucedió el ataque contra los músicos.

Se sabe que el fundador de esta célula criminal es Celso Ortega Rosas, “El Ardilla”, de ahí el origen de su nombre.

Dedicados a la siembra de amapola en la sierra guerrerense, “Los Ardillos” –como varias bandas criminales– incursionaron en otro tipo de delitos, desde el cobro de piso y la piratería, hasta los secuestros.

“La Ardilla” fue detenido en 2008 acusado de secuestro de una mujer y homicidio de dos agentes de la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).

Ortega Rosas recuperó su libertad tres años después, la paz no le duró mucho, a los pocos días fue asesinado por un grupo armado al frente de su casa.

Los responsables de la muerte de “La Ardilla” habrían sido miembros de “Los Rojos” otra célula criminal emanada de los Beltrán Leyva, lo que muestra que varias de estas bandas, aunque salidas de la misma organización criminal, suelen ser enemigas.

“El Ardilla” dejó siete hijos: Celso, Jorge Iván, Antonio, Bernardo, Pedro, Juana y Lilia, los dos primeros sus herederos criminales.

Celso y Jorge Iván Ortega Jiménez son los máximos líderes identificados de “Los Ardillos”, su hermano Antonio también está dentro del grupo delictivo, los tres cuentan do orden de aprehensión.

Otro de los hijos “destacados” de “La Ardilla” es Bernardo Ortega Jiménez, expresidente municipal de Quechultenango, expresidente del consejo del PRD en Guerrero y tres veces diputado local guerrerense, actualmente en funciones.  

Bernardo nunca ha negado sus nexos familiares, pero asegura que no tiene nada que ver con “Los Ardillos”.

El móvil detrás de la masacre en Chilapa en contra de los músicos sería una disputa que “Los Ardillos” han comenzado contra la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), grupo de autodefensa en Guerrero que se ha levantado en armas para hacerle frente a criminales.

Un ejemplo de esto es la pronta respuesta de la CRAC, quienes realizaron manifestaciones tras los hechos para exigir la intervención de las autoridades ante la masacre.

A esto se suman las imágenes del reportero Alejandro Ortíz, de la agencia de noticias alemana Deutsche Presse Agentur, que muestran a niños armados sumándose a la CRAC en Chilapa, donde ocurrió la masacre.

Al menos 19 niños se integraron al grupo de autodefensa, varios de ellos hijos de los músicos asesinados por “Los Ardillos”.