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Se dispara 400% robo de motos en Tabasco; muchas van al narco

Durante los últimos cuatro años se elevó el delito en un 400 por ciento y, casi en su totalidad, el ilícito quedó impune

Escrito en ESTADOS el

VILLAHERMOSA (La Silla Rota).- En cualquier punto de la ciudad y a toda hora, los delincuentes abordan a motociclistas para despojarlos de esos vehículos, sean propios o de empresas distribuidoras de diversos productos. Durante los primeros cinco meses del año, fueron robadas 5.4 motocicletas diarias, en promedio.

Durante los últimos cuatro años en Tabasco se elevó exponencialmente el delito de robo de motocicletas. De 2015 a 2018 se incrementó un 400 por ciento y, casi en su totalidad, el ilícito quedó impune.

La delincuencia utiliza esos vehículos para revenderlos, comercializarlas para refacciones, cometer otros atracos a comercios y transeúntes, para servicio de “halcones”, así como los sicarios para efectuar ejecuciones.

Las autoridades nunca efectuaron acciones y políticas públicas para prevenir o combatir ese delito, causante de fuerte daño socioeconómico para la clase obrera, principalmente, que la utiliza como medio de transporte o de trabajo.

José “N”, recuerda que un sábado a las 11.00 horas se detuvo en el semáforo de la avenida Gregorio Méndez, colonia Tamulté, cuando se le acercó un individuo con un arma blanca, lo amenazó y obligó a descender y entregarle la motocicleta.

Denunció el hecho al policía preventivo estatal, luego acudió a la Fiscalía General del estado (FGET), para presentar la denuncia de hechos y terminó ese trámite al anochecer. Han transcurrido ocho meses y ni señas de que las autoridades resuelvan el caso.

Carlos “N”, una mañana de domingo, 22 de julio del año pasado, acudió a entregar un paquete de comida solicitado a un domicilio de la colonia Emiliano Zapata. Al llegar dos personas lo abordaron con armas blancas, donde además de la comida, celular y dinero, le quitaron la motocicleta.

La victima caminó para salir del punto y abordar un taxi hacia su casa. Luego acudió a la Fiscalía para exponer la denuncia, Carpeta de Investigación CI-FRV-1520/2018, por el delito de robo de motocicleta. Terminó al anochecer en la diligencia ministerial.

Luego entregó un oficio de la FGET, dirigido a la Policía Federal para realizar el registro del Sistema Andrómeda, de la motocicleta blanca, marca Italika, modelo 2017, y los respectivos números de motor y serie, para que en caso de ser detectada aseguren al vehículo y al probable imputado. A un año del robo, tampoco se ha esclarecido el delito.

Las pérdidas económicas

Durante el 2018 -año de más alta incidencia-, se iniciaron dos mil 699 Carpetas de Investigación por robo de motocicleta, un promedio de 7.3 diarias. A precios actuales, las motocicletas de mayor uso común oscilan en 18 mil pesos en promedio, con lo diariamente se registrarían pérdidas económicas por 131,400 pesos, aproximadamente.

Del 2016 a mayo del 2019, la Fiscalía de Tabasco, inició siete mil 452 Carpetas de Investigación por el delito de robo de motocicletas, según las estadísticas del secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

En 2015, fueron 543 motocicletas robadas; 2016 subió a mil 170 unidades hurtadas; en 2017 fueron dos mil 223; en 2018, dos mil 699 motos. Esos cuatro años fueron los últimos del sexenio del entonces gobernador Arturo Nuñez Jiménez, del PRD.

Y en los primeros cinco meses de la administración estatal de Adán Augusto López Hernández, de Morena, iban 817 Carpetas de Investigación por el delito de robo de motocicletas, de acuerdo con el SESNSP.

Combate frontal

López Hernández envió al Congreso local una iniciativa para reformar leyes locales con las cuales pretende contener el delito de robos de este tipo de vehículos.

Una de las medidas será la obligatoriedad del emplacamiento de motos, pues, reconoce, que una cantidad alta circula sin esas matrículas que no están dadas de alta ante el gobierno estatal, que permita la identificación de la unidad y del propietario.

El gobierno estatal pretende, que a través de la Secretaría de Finanzas, brinde accesos a sistemas informáticos a los negocios de motocicletas para iniciar la inscripción, desde la venta, al Registro Estatal de Vehículos, y en su caso cobrarán los derechos por registro, emisión de tarjeta de circulación, calcomanía y otorgamiento de juegos de placas.

También propone acciones de control y vigilancia con acciones de verificación a las motos, de que estén inscritos en el Registro Público de Vehículos (REPUVE), y cuenten con ese dispositivo electrónico para consulta de datos de forma remota.

Las reformas que está a punto de aprobar el Congreso, con mayoría de Morena, partido al que pertenece el Ejecutivo local, establecen que las motocicletas, motocarros y motonetas deberán contar con inscripción obligatoria al Registro Público Vehicular (REPUVE).

Será la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana por medio de la Policía Estatal de Caminos, que implementará acciones de verificación para que las unidades cuenten con el dispositivo electrónico que permita consultar de forma remota los datos en el REPUVE.

En la iniciativa enviada al Congreso, el gobernador del estado reconoce que el uso de motocicletas “para la ejecución de delitos se ha convertido en un modus operandi recurrido por los delincuentes”, esto derivado del bajo costo de las unidades, su fácil conducción entre el congestionamiento de calles y avenidas, así como por la carencia de mecanismos jurídicos adecuados para “un estricto control”.

Al reconocer que el combate frontal contra la delincuencia e impunidad representa un factor para el bienestar de la población, López Hernández admite también la prioridad de establecer estrategias y diseñar acciones eficaces y eficientes.

En tanto, para el presidente de la Comisión Ordinaria de Comunicaciones y Transportes, Tránsito y Vialidad, José Concepción García González, la iniciativa brinda certeza jurídica, coadyuva en la legalidad de la compra-venta de esta unidad de transporte y logrará la reducción de los delitos, al tiempo de resaltar el interés brindarle a la población certidumbre y seguridad.