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¿Quién es Édgar Veytia, el “narcofiscal” del CJNG?

Con el respaldo del exfiscal, el CJNG incursionó Nayarit y se hizo de la plaza; fue muy cercano con el entonces gobernador Roberto Sandoval hasta su caída

Escrito en ESTADOS el

Fue un miércoles 29 de marzo de 2017 cuando Édgar Veytia, el entonces fiscal general de Nayarit, fue detenido en San Diego, Estados Unidos.

Veytia fue acusado por autoridades estadunidense de introducir drogas a dicho país.

El gobierno de Estados Unidos vinculó al fiscal nayarita con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Y no era coincidencia, esta organización criminal trasnacional ascendió rápidamente en Nayarit con la llegada del entonces gobernador Roberto Sandoval y su fiscal Édgar Veytia.

En 2011, el año en que Sandoval a la gubernatura, el Cártel de Sinaloa y los Beltrán Leyva se disputaban el control de Nayarit, según datos de la Procuraduría General de la República (PGR).

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Para 2015, dos años después de que Veytia llegara a la Fiscalía General del Estado (FGE), la entidad nayarita era controlada en su mayoría por el CJNG, con una ligera presencia del Cártel de Sinaloa y los Beltrán Leyva, de acuerdo con datos de la Administración para el Control de Drogas (DEA).

Durante la administración de Édgar Veytia, el gobierno estatal y federal comenzaron una ardua cacería contra los Beltrán Leyva, dejando las puertas abierta al CJNG.

Por ejemplo, el 10 de febrero de 2016 en un fuerte y letal operativo de la Marina fue abatido en Tepic el considerado líder máximo de los Beltrán Leyva, Juan Francisco Patrón Sánchez, "El H2", junto con 11 miembros del grupo delictivo.

Un video difundido en redes sociales muestra el momento en que un helicóptero UH-60M Black Hawk arremete contra el inmueble donde se encontraba "El H2".

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El abatimiento de “El H2” dejó prácticamente la plaza para el CJNG en Nayarit, quien ha mantenido su presencia criminal hasta hoy, según datos de la misma PGR.

Cuando Veytia fue detenido en Estados Unidos, Sandoval se deslindó totalmente de él, sin embargo, ambos tenían una amplia relación de amistad y hasta eran compadres.

Por ejemplo, Veytia pretendía regalarle al gobernador la casa donde “El H2” cayó, según publicó El Financiero. Un "trofeo de guerra" con tres plantas, dos cúpulas y un enorme patio con alberca.

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No era la primera vez que señalaban a Veytia por ofrecer regalos a Sandoval. En 2014 trascendió que el exfiscal obsequió varios de los ranchos que tiene en su poder al exgobernador, así como caballos purasangre, y una propiedad en Tepic de 300 hectáreas conocida como "La Resolana".

Casi dos años después de su captura, Edgar Veytia se declaró culpable de conspiración para fabricar y distribuir heroína, cocaína, metanfetamina y marihuana, en Estados Unidos.

El ascenso de Édgar Veytia

En Nayarit, el exfiscal era mejor conocido como “El Diablo”. Proveniente de Tijuana, Baja California, llegó a dicho estado debido a que la familia de su esposa.

Sin un peso en la bolsa, Veytia comenzó a vender herramientas que trajo de tierras tijuanenses.

Poco a poco comenzó a realizar amistades con conductores y dueños de autobuses, principales clientes de sus herramientas.

Así pasó a lavar y arreglar unidades, para luego ser cobrador de pasaje de transporte público.

No fue hasta que su esposa recibió de herencia la concesión para operar un camión, con la cual Veytia obtenía 300 pesos diarios, cuando el exfiscal consiguió una relativa estabilidad económica.

Con sus ganancias compró otra unidad, compro oro y obtuvo tragamonedas. Inició su imperio a través de una empresa de transporte.

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Así, Veytia utilizaba sus autobuses para traficar droga y la empresa para lavar dinero.

La amistad entre Veytia y Sandoval de consolidó cuando el exgobernador fue padrino de la fiesta de XV años de la hija del exfiscal.

Cuando Sandoval fue candidato a alcalde de Tepic, Veytia comenzó su incursión en la política.

Como presidente municipal, Roberto Sandoval nombró a Édgar Veytia como director de Tránsito y Vialidad, luego, secretario de Seguridad Pública.

Al llegar a la gubernatura de Nayarit, Sandoval lo colocó en la subprocuraduría del estado y luego fiscal general.  

Robo de ganado, expropiación de terrenos, secuestros y extorsiones son otros de los señalamientos que Édgar Veytia carga sobre sus hombros.

rgg