HIDALGO (La Silla Rota).- Acusaciones por ser dados de baja de planteles educativos y presuntos agravios verbales de funcionarios y trabajadores de empresas privadas son parte de las 15 quejas que, de enero de 2010 al 17 de mayo de 2017, se han iniciado en la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) por posible discriminación a causa de preferencias sexuales.
Entre los casos se encuentra el de dos alumnas del Centro Hidalguense de Estudios Superiores (Cenhies), quienes manifestaron que debido a que iniciaron una relación de pareja, la entrenadora las dio de baja del equipo de bascketball y, con ello, no podían hacer uso de la casa para foráneas que tienen beca, y debían cubrir cien por ciento de pago por concepto de colegiatura.
Éste, que corresponde al expediente VG-1249-16, sin embargo, se resolvió en “amigable composición, de acuerdo con un informe que el organismo autónomo proporcionó a La Silla Rota sobre posibles hechos violatorios de derechos humanos, después de la conmemoración del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia
En 14 de las quejas no hubo recomendación por parte de la CDHEH debido al desistimiento de la parte posiblemente agraviada (en dos incidentes), a que no acreditó la discriminación (en tres más), o que fueron archivadas por “amigable composición (en cuatro sucesos). Asimismo, otra no fue ratificada y una más fue concluida por “falta de interés”.
Sólo una, la VG-0861-17, sigo en proceso y fue presentada, este 2017, contra el gerente del restaurante “Tu Lunch”, ya que presuntamente fueron despedidas de manera injustificada por su preferencia sexual.
De acuerdo con los expedientes de la Comisión, en nueve incidentes estuvo involucrado, como posible agresor, un funcionario, entre ellos una conciliadora municipal, cuyo ayuntamiento para el que labora no se dio a conocer, quien citó a una mujer, “a petición del padre de sus hijos”, para que, acusó, “suscribiera un acuerdo dónde se establecía que sus hijos deberían permanecer con su papá debido a que las preferencias sexuales de la quejosa eran una aberración”.
Esa queja, VG-0942-17, no obstante, no fue ratificada, según la Derechos Humanos.
El año con mayor incidencia de quejas fue 2016, con cuatro.
Además del incidente en Cenhies, un paciente del Hospital Psiquiatrico Villa Ocaranza, que en ese lugar también realizaba servicio social, acusó que el subdirector y la jefa de enseñanza le dijeron que por su enfermedad y su orientación sexual no podía estar “como paciente ni como estudiante (VG-1908-16)”; un elemento de una Secretaría de Seguridad que refirió que una compañera utilizaba lenguaje discriminatorio en su contra (TA-0388-16), y un taxista que acusó que Director de Transporte en Huejutla de Reyes le pidió a la dueña de la unidad con la que trabajaba que no lo empleara más por sus “preferencia sexuales” (H-0170-16).
La primera queja data de 2012 cuando una persona hizo del conocimiento del organismo que por tres meses recibió hostigamiento y discriminación sexual de un “productor”, “situación que se agudizó cuando lo jaloneo y le expresó que lo iba a golpear”.
Ese año, otro señaló que la supervisora y jefa inmediata de la empresa Atento lo hostigó laboralmente por la misma causa.
En 2013, en tanto, el allegado a un recluso del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Ixmiquilpan acusó que custodios e internos lo acosaban por ser homosexual (VGJ-2598-13); además, un estuante de la Preparatoria Morelos, de Tula, señaló a la directora del plantel y a “otros profesores”, cuyos nombres no son proporcionados en el informe de la Comisión de Derechos Humanos, por negarle la inscripción a sexto semestre por su orientación sexual.
En el primer caso el quejoso desistió, en el segundo, el ente autónomo expuso que no se acreditó la violación.