La crisis del partido la reconocen todos. "El prestigio y la credibilidad del PRD han sido lastimados, la crisis que vivimos muestra en lo que hemos fallado", dice su dirigente Carlos Navarrete. Después de la salida de Cuauhtémoc Cárdenas, analistas políticos consideran que ésta es la peor crisis que vive el partido, pero en 25 años han pasado por muchas más.
Se les ha señalado como un partido populista y se han cuestionado las acciones de Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard en esa materia, sus detractores se han concentrado en mostrar el "lado B" de las políticas asistencialistas que se han mantenido durante los sexenios que el partido ha estado en el gobierno de la ciudad de México.
A principios de 2004, el PRD sufrió una de sus más grandes caídas, cuando aparecieron los llamados videoescandalos. El primer vídeo exhibido en televisión abierta mostraba a Gustavo Ponce Meléndez, Secretario de Finanzas del Distrito Federal, apostando en un casino de Las Vegas, Estados Unidos. Ponce escapó esa misma noche. Posteriormente, la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal reveló que el ex funcionario era investigado por lavado de dinero.
Unos días después, en el noticiero El Mañanero, conducido por “Brozo” se mostró un video donde René Bejarano, diputado de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y antiguo colaborador de López Obrador, recibía dinero del empresario Carlos Ahumada. Bejarano señaló poco después que el dinero había sido entregado a la entonces presidenta del partido, Rosario Robles. Una parte del partido criticó duramente a Robles y la hizo responsable de financiar las campañas políticas con dinero de Ahumada.
En otros videos se mostró al delegado de Tlalpan, Carlos Ímaz, también recibiendo dinero de manos de Carlos Ahumada. Rosario Robles también fue señalada como responsable. Posteriormente, nuevamente Bejarano salió en otro video, negociando con Ahumada la asignación de puestos públicos en la delegación Álvaro Obregón.
Los escándalos repercutieron en la renuncia y expulsión de los implicados. Andrés Manuel López Obrador, condenó los hechos y los relacionó con una embestida política en su contra, orquestada por el ex presidente Carlos Salinas de Gortari con el objetivo de reducir su popularidad.
En el 2006 el bloqueo a Paseo de la Reforma tuvo un costo político muy alto para el PRD. Fue el 30 de julio de 2006, cuando en el Zócalo López Obrador lanzó una pregunta. "escuchen bien, amigas y amigos, lo que les voy a decir, quiero una respuesta de ustedes, sincera. Les propongo que nos quedemos aquí, en asamblea permanente, que permanezcamos aquí, día y noche, hasta que se cuenten los votos y tengamos un presidente electo con la legalidad mínima que nos merecemos los mexicanos. Les aseguro que no será en vano nuestro esfuerzo y sacrificio”, dijo, la respuesta fue inmediata, miles se quedaron en campamento invadiendo todo el paseo de la Reforma y la calle de Madero hasta el Zócalo. Un plantón, que se prolongó por 48 días.
Al partido también le han salpicado las grandes construcciones polémicas en la Ciudad de México como el segundo piso y la Línea 12 del Metro. La construcción de los primeros 12 kilómetros de la vialidad construida en la gestión de López Obrador tuvieron un costo de 5 mil 680 millones. Esto según la estimación de la Oficialía Mayor del GDF, los siguientes 34 kilómetros costaron 78% menos. AMLO fue duramente criticado por la constricción y el costo de esa obra, como lo es ahora Marcelo Ebrard por la Línea 12.
Los gobiernos del PRD también han estado acompañados por la tragedia como el caso del New’s Divine, cuando en el antro ubicado en la delegación Gustavo A. Madero fallecieron 12 personas durante un operativo policial comandado por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Distrito Federal en 2008.
La policía encabezó un operativo para impedir la venta de bebidas alcohólicas y drogas a menores de edad. Pero una fallida planeación policiaca, aunado al sobre cupo de personas y que la salida de emergencia estaba bloqueada, tuvo como consecuencia la muerte por asfixia de 12 personas, entre ellas, dos policías auxiliares, un policía judicial y nueve adolescentes.
La policía detuvo al dueño del lugar, Alfredo Maya Ortiz y a los empleados, Víctor Rodrigo Delgado Hernández, Mariana de la Cruz Gayosso y Juan Andrés Santos, como presuntos responsables de lo sucedido, mientras tanto, la Secretaría de Seguridad Pública, incriminaba al dueño del establecimiento, Alfredo Maya, de haber sido el culpable de la estampida que causó la muerte de las diez personas.
Posteriormente el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubón declaró que los servidores públicos que ejecutaron el operativo de verificación en el establecimiento New's Divine: "cometieron graves errores y serían los primeros en ser castigados con apego a la ley, junto con aquellos funcionarios de la delegación Gustavo A. Madero que autorizaron y permitieron el funcionamiento del antro" y anunció la destitución del encargado del operativo, Guillermo Zayas González, que se desempeñaba como director regional de la zona norte de la Secretaría de Seguridad Pública y coordinador del Unipol en la delegación Gustavo A. Madero.
La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, a cargo del Ombudsman Emilio Álvarez Icaza, elaboró un Informe Especial en donde se compruebó las diversas violaciones a Derechos Humanos por parte de la Secretaría de Seguridad Pública del D.F. (SSPDF), la Procuraduría General de Justicia del D.F. (PGJDF) y personal de la delegación Gustavo A. Madero.
Entre los altos funcionarios responsables de la tragedia se señalaron a Joel Ortega Cuevas, como responsable de la SSPDF, al Subsecretario de la SSPDF, Luis Rosales Gamboa, Rodolfo Félix Cárdenas, a cargo de la PGJDF, y el ex-delegado de la Gustavo A. Madero, Francisco Chíguil Figueroa. Sin embargo, el Informe Especial omitió la responsabilidad de los hechos al Jefe de Gobierno Marcelo Ebrard.
El costo político fue alto, sobre todos cuando tres días después de la tragedia se dio a conocer un video donde se demuestra que el caos lo originaron los policías, cuando, algunos de ellos con pasamontañas, entraron al bar discoteca con armas de asalto, a gritos y golpeando para desalojar el inmueble.
En esta prueba, se observa que es la policía quien cierra las puertas, creando un tapón humano, mientras, al interior golpeaban y proferían insultos a los jóvenes. También se ve al dueño del lugar dirigirse a los muchachos pidiendo que desalojen tranquila y ordenadamente, por ello, Alfredo Maya y Juan Andrés Santos, serían consignados por el delito de corrupción de menores y no por homicidio.
Joel Ortega tuvo que renunciar al cargo y el partido cargar con los señalamientos que le hicieron al gobierno capitalino en aquel entonces.
La relación del partido con la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y la designación de José Luis Abarca como presidente Municipal de Iguala son de las últimas sacudidas al PRD, pues la tragedia de los normalistas dejó al descubierto que candidatos del crimen organizado podían llegar a cargos populares bajo la bandera del partido.
José Luis Abarca pasó de vender sombreros a ser dueño de un centro comercial, y se le acusa de usar recursos de Iguala para pagarle al grupo criminal de Guerreros Unidos, entre cuyos líderes se encontraba uno de los hermanos de su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa.
La ex Primera Dama de Iguala aspiraba ser consejera perredista, antes de huir de Iguala.
El PRD decidió expulsar a Abarca del partido, pero para estas alturas la opción pública tiene claro que el acusado de mantener vínculos con el crimen organizado es perredista y difícilmente olvidarán el asunto en las próximas elecciones.
Este último escándalo fue el que orilló a uno de sus fundadores a renunciar, Cuauhtémoc Cárdenas de despidió del partido en la llamada más grande crisis del PRD.
nm