PACHUCA.- Ante la contingencia del covid-19, pedir alimentos a domicilio se ha convertido en una opción para evitar salir, pero, aun así, el trabajo para los repartidores ha disminuido hasta en 80 por ciento.
Sentados bajo un árbol y jugando en su celular mientras les cae un pedido, dos repartidores de Uber Eats esperan afuera de una pizzería. En entrevista con LSR Hidalgo, ambos mencionan que en una reunión de trabajo les informaron que los envíos habían disminuido hasta ocho veces lo normal.
Edgar, un joven estudiante de 18 años de edad, indica que en promedio realizaba 10 viajes al día, pero que con la contingencia apenas alcanza a hacer tres.
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Explica que ante esta situación la empresa, a través de la aplicación, en cada entrega les recuerda las medidas de prevención de contagio, que van desde lavarse las manos hasta mantener su sana distancia con los clientes.
Indica que una de las nuevas medidas es que los comensales paguen con tarjeta y que pidan que su comida se la deje en la puerta, para evitar el contacto directo con el repartidor.
Aun así, Edgar teme por su salud, pero señala que es su única manera de obtener ingresos durante las vacaciones.
Recuerda que ayer tuvo que entregar un pedido a trabajadores del Hospital General de Pachuca, donde estuvo internado el primer hidalguense que murió por el covid-19, antes de ser trasladado a un nosocomio de la Ciudad de México, donde finalmente perdió la vida.
Fotografía: Giovanny Flores
Sí te da un poquito de cosa porque sabes que ellos están más en contacto con todo ese rollo (el virus y los contagios)”, mencionó.
Algunas de las medidas de prevención que él toma son bañarse en cuanto llega a su casa y evitar tener contacto directo con su familia.
Agregó que ante el escaso trabajo, un grupo de repartidores optaron por organizarse e ir al bosque de El Cedral para comer.
En Hidalgo, hasta la tarde de ayer las autoridades reportaron 41 casos positivos de coronavirus, seis defunciones y 87 sospechosos.
Fotografía: Giovanny Flores
emh