Como en la escuela, embajadores y cónsules tomaron hoy un curso intensivo, y muy extensivo, sobre cómo traer dinero al país ante la eliminación de lo que fue Proméxico, el consejo de promoción turística del país en el extranjero, cuyas funciones fueron absorbidas por la Cancillería y la secretaría de Economía. Y el gobierno federal impartió hoy este curso, de la mano de su mejor aliado: la iniciativa privada.
“Tienen ustedes un reto enorme… Nos ponemos a sus órdenes” les dijo Javier Treviño, integrante del Consejo Coordinador Empresarial. “Nosotros y las diferentes organizaciones que integramos este equipo, tenemos muchas ganas de trabajar con ustedes en el mundo. Sepan que cuentan con nosotros”.
El cuerpo diplomático lo sabía. Sabía que el motivo principal de su reunión 31, no era solo regresar a México para pasar lista con el canciller Ebrard y el presidente López Obrador. Sino para tener consciencia del papel clave que jugarán en la economía como promotores en el extranjero. Por eso Treviño supo cómo manejar los números para dar dimensión al problema. “Hoy solo se invierte el 21 por ciento del PIB cuando por lo menos tiene que ser entre el 25 y 26 por ciento sostenible, para así alcanzar el cuatro por ciento de crecimiento que buscamos para este año”, señaló. Y subrayó que la clave para detonar inversión, no se concentra solo en grandes proyectos como el aeropuerto en Santa Lucía o el Tren Maya o el corredor Transístmico o la refinería Dos Bocas.
“Nosotros pudimos identificar mil 600 proyectos de infraestructura para los próximos cinco años, en los cuales se podría requerir una inversión de 400 mil millones de dólares para detonar inversión y crecimiento en el país”, aseguró. Y adelantó que algunos de estos serán dados a conocer por la presidencia en las próximas semanas, pues hay un acuerdo importante entre ambas partes.
“Para un primer capítulo, diríamos una patada de salida, un saque, se requiere de alrededor de 43 mil millones de dólares en algunos de estos proyectos”. El acuerdo entre gobierno federal e IP, informó, incluye eliminar barreras en cuanto a trámites -entre ambas partes-, a nivel federal, estatal, municipal y de comunidad, a fin de agilizar el crecimiento y los resultados.
Money, money, money!
Graciela Márquez, secretaria de Economía, les planteó la celebración de reuniones de varios tipos en el Centro Internacional de Negocios de esta dependencia; así como la elaboración de carpetas de inversión especializadas por país. Y explicó cómo funcionará la celebración de días específicos para reunir empresarios extranjeros con nacionales. “Por ejemplo, el próximo lunes 13 es el día de China y ahí juntaremos a los secretarios de economía de todos los estados con potenciales inversionistas”, dijo.
Los funcionarios del gobierno federal exhortaron a los integrantes del cuerpo diplomático a guiarlos en las necesidades económicas del país en que hoy desempeñan su labor de gobierno, a fin de detectar espacios de oportunidad para la economía mexicana; ya se en materia de importación o exportación.
“¡Invítenos a participar en sus reuniones importantes con empresarios, en las ciudades o países donde ustedes están trabajando!”, les pidió Treviño. E incluso planteó el mismo esquema, pero al revés: traerlos a México para celebrar aquí las reuniones.
Alicia Bárcenas, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, no se quedó atrás y también habló muy claro al final de su exposición sobre el proyecto integral para el desarrollo de Honduras, Salvador, Guatemala y zona sur-sureste de México, con el que se pretende detonar la inversión económica con base en 108 proyectos que, de concretarse, podrían frenar de manera sustancial la migración a Norteamérica.
“Los próximos pasos, que es donde yo los necesito a ustedes embajadores todos, es lo siguiente: se convocará a una reunión de donantes en la última semana de febrero o primera de marzo. Será aquí en México y asistirá António Guterres, secretario general de la ONU”, les informó. Y luego -con nombre y apellido- se dirigió en algunos de ellos en particular. “Necesitamos asegurar que venga el secretario de Cooperación de España, mi querida Roberta… El BNZ ¿Dónde estás Rogelio?... El BNZ de Alemania, el BNZ de Japón ¡Que vengan los cooperantes! Porque si no…” y guardó silencio en señal de incertidumbre.
Luego continúo, “Mauricio Escanero (embajador de Bélgica), no sé si está aquí, necesitamos a la Unión Europea sentada en serio… ¡Necesitamos que venga la cooperación internacional! Que vea este programa y diga: aquí me voy yo. Ahí, creo, realmente podríamos hacer un gran servicio”, les dijo.
Treviño cerró el tema frente al cuerpo diplomático, con un planteamiento clave. “Pensemos ¿Por qué México será mejor en cinco años, cuando termine el gobierno del presidente López Obrador, a diferencia del México que tenemos hoy? ¡Esa es la historia que tenemos que contar ante los inversionistas, banqueros y ante quienes están interesados en nuestro país!”.
MJP