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¿Qué empresas ganan tras el revés a EU por el atún?

La resolución de la OMC cambia las reglas para la exportación de atún a Estados Unidos; Grupomar y Pinsa podrían duplicar sus ventas

Escrito en DINERO el

Estados Unidos retiró el primer embargo atunero en 1986, pero en 1990 impuso nuevas restricciones, argumentando que México ocasionaba la muerte de delfines por sus métodos de captura de atún. Por eso creó la etiqueta Dolphin Safe (Delfín Seguro), un sello que le ha sido negado a México, aunque desde entonces las empresas locales desarrollaron técnicas sustentables.

Ahora, eso va a cambiar. La Organización Mundial del Comercio (OMC) reconoció que el gobierno estadunidense afectó a los productores mexicanos de atún, debido a las reglas de ese país sobre el etiquetado y determinó que dicho perjuicio equivale a un monto de 163 millones de dólares estadounidenses anuales.

Con ello, de acuerdo con un reportaje de Expansión, las empresas mexicanas tendrán libre acceso a un mercado del doble del tamaño que el mexicano, según Rubén Velázquez, director general de Pinsa División Comercial.

“Estados Unidos es el mercado más importante del mundo en atún enlatado. Si el mercado de México vale más de 900 millones de dólares (mdd), el de Estados Unidos es de 2,000 millones”, asegura.

México produce 162,422 toneladas de atún al año, de las cuales sólo 6% exporta a Estados Unidos, según datos de la Conapesca. Pero ese volumen, afirma Velázquez, puede subir a 15%.

Además de en la exportación, las empresas locales pueden encontrar otra oportunidad de negocio en la maquila de atún para marcas estadounidenses.

“Yo creo que ahí va a estar el volumen más relevante de la participación mexicana en el mercado de Estados Unidos”, dice Velázquez.

Estados Unidos es uno de los principales importadores de atún a nivel mundial. Sus principales proveedores son Tailandia, con 50% del volumen, Vietnam, con 13%, y Ecuador con 12%, según datos revelados por Pinsa. “No veo por qué México no pudiera convertirse en un Ecuador si tuviera esa capacidad de comercialización”, opina Velázquez.

Los beneficiados

Grupo Pinsa, con las marcas Dolores y Mazatún, y Grupomar, con Tuny, agrupan 80% de las ventas de atún enlatado del país, según datos de la agencia Nielsen y de las empresas. Ahora quieren aprovechar estas oportunidades. Sin el tema del Dolphin Safe, y mejorando el acceso al mercado europeo, las ventas podrían duplicarse en unos pocos años, dice Suárez.

Pinsa y Grupomar sobrevivieron y llegaron a liderar el mercado gracias a las eficiencias que lograron con la integración vertical de sus negocios, siendo duen~os tanto de las flotas como de las fábricas, y a su habilidad para comercializar las marcas.

La flota atunera de México cuenta hoy con 61 embarcaciones, que tienen un valor estimado de 25 y 30 millones de dólares cada una.

Una lata de atún cuesta menos que un refresco, a pesar de todo lo que todo hay detrás, dice Suárez. “Pocas actividades pueden presumir de ser tan competitivas como ésta —añade—. Es una industria tan bien manejada y tan eficiente que por eso quedamos muy pocos. Tal vez nuestras desgracias nos sirvieron para hacerlo mejor".

El momento más esperado

A mediados de los 90, Mario Aguilar, actual titular de la Conapesca, fue el encargado de llevar el caso del embargo al atún mexicano ante la Organizacio´n Mundial del Comercio en Ginebra, Suiza.

En las audiencias, el funcionario expuso los avances de México en términos de pesca sustentable: las flotas no hacían pesca nocturna, usaban el llamado paño medina —un tipo de malla especial que evita que el delfín se atore en ella—, llevaban observadores internacionales en cada barco y tenían buzos que ayudaban a escapar a los delfines de la red, explica Mariana Ramos, directora de la Alianza del Pacífico por el Atún Sustentable, un organismo que agrupa a Pinsa, Grupomar, Herdez y Procesa, las cuatro empresas que representan 90% de la producción de atún en México.

Sin embargo, no fue hasta finales de 2015 cuando la OMC declaró discriminatorio el sello Dolphin Safe para México.

Por eso, ahora la OMC sancionó a Estados Unidos.

Si Estados Unidos no cambia su norma, México podría imponer restricciones a las importaciones estadunidenses por hasta 472 millones de do´lares anuales, para compensar los daños del sello Dolphin Safe a la industria atunera local, explica Mario Aguilar, de la Conapesca.

Para asegurar su acceso a nuevos mercados, no sólo en Estados Unidos, sino también en Europa, Pinsa, Grupomar, Herdez y Procesa participan en el programa de certificación del Marine Stewardship Council (MSC), un organismo independiente que reconoce la sustentabilidad de las empresas pesqueras. Con información de Expansión