Durante este año, se han suscitado ciberataques contra distintas instituciones financieras y bancarias a través del Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI), red doméstica operada por el Banco de México (Banxico) que a diario mueve miles de millones de dólares.
México es el país con más ataques de este tipo en América Latina, el tercero a nivel mundial. Su atractivo reside en que no cuenta con sólidos mecanismos de defensa para hacer frente a las amenazas cibernéticas, afirma Eduardo Palacio, especialista en ciberseguridad de IBM.
Con motivo del reciente ciberataque de este tipo a la aseguradora AXA, ocurrido el pasado 22 de octubre, en LA SILLA ROTA hacemos un recuento de los incidentes que han significado la pérdida de millones de pesos.
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Abril. A fines del cuarto mes del año, Banorte informó sobre un “incidente” que ocasionó la ralentización de las transacciones. El banco central de México dijo que estaba investigando los problemas que afectaron al menos a tres instituciones financieras locales.
Lorenza Martínez, directora del SPEI aseguró que el problema tenía que ver con el software desarrollado por instituciones o proveedores externos para conectarse al sistema de pagos.
Las lentas transferencias interbancarias, así como la falta de respuestas claras por parte de las autoridades, se reflejaron con el incremento de las preocupaciones en las redes sociales de que la segunda mayor economía de América Latina podría ser una víctima más de los ataques informáticos que afectaron a bancos centrales y grupos financieros de todo el mundo.
Mayo.- Posteriormente, a principios del mes de mayo, se realizó la sustracción de entre 300 millones y 400 millones de pesos, de al menos cinco bancos mexicanos. En ambos casos, se instruyó la desconexión de la red financiera de las entidades atacadas.
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Octubre.- Durante la última semana, la empresa aseguradora AXA fue el centro de un nuevo ciberataque en el que los delincuentes evitaron generar alertas en el sistema financiero mexicano. Luego de realizar transferencias por arriba de los 200 mil pesos, se redujo a cifras de 49 mil 990 pesos, menor al límite de 50 mil pesos impuesto en mayo por el Banco de México.
Tras el incidente, se elevó de "amarillo" a "rojo" el nivel de alerta de seguridad informática del sistema de pagos. Alejandro Díaz de León, jefe del banco central, afirmó en conferencia de prensa que la alerta no se podrá suspender a menos que se tenga claridad de que el episodio “ya terminó, ya se mitigó y de que estamos en proceso de remediación".
“Estos fenómenos los vamos a ver con mayor frecuencia, no sólo porque México esté en una posición de vulnerabilidad, sino porque está ocurriendo en todo el mundo”, aseguró Mario Di Costanzo, presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
DJH